Pero los fascistas, claro, siempre son los otros.

viernes, 23 de febrero de 2024

Vilapiscina (Nou Barris). Iglesia de Santa Eulalia

Esta parte de Barcelona fue el punto de acogida de los obreros llegados desde otras partes de España en la década de 1950 y 60 del siglo pasado.

El último barrio reconocido de Nou Barris, es Can Peguera y con él, ya no son nueve, sino trece.

Vilapiscina está delimitada por las calles Fabra i Puig, Petrarca, Paseig Maragall y Riera de Horta.

En Vilapiscina, destaca por su antigüedad el núcleo de la iglesia de Santa Eulalia, formado por la iglesia y el edificio de Ca l´Artés, antiguo hostal del s. XV. El conjunto en sí, se integra en lo llamado el Turó de la Peira.

Parece que tal como la vemos hoy, los muros que hacen de fundamento y la unen a Can Basté, son de 1782. Está coronada por la cruz de Santa Eulalia, pero este nombre, ya se encuentra escrito en un documento en el 991, que no era más que una escritura de venta. Su planta es de cruz irregular (más grande en el lado izquierdo), y es que recibe la herencia de anteriores construcciones. En su capilla hay vestigios de orígen románico (s.X), e incluso materiales aprovechados de la época romana.

El conjunto es un pequeño rincón bellísimo que vale la pena visitar un día, dando un paseo.

Les pongo unas fotos de 1970 (cuando estaba la iglesia casi en perpetuo desamparo) y otras de la actualidad, así podemos hacer una pequeña comparación.

Aquesta part de Barcelona va ser el punt d’acollida dels obrers arribats des d’altres parts d’Espanya en la dècada de 1950 i 60 del segle passat.
L’últim barri reconegut de Nou Barris, és Can Peguera i amb ell, ja no són nou, sinó tretze. 

Vilapiscina està delimitada pels carrers Fabra i Puig, Petrarca, Paseig Maragall i Riera d’Horta. 

A Vilapiscina, destaca per la seva antigüetat el nucli de l’església de Santa Eulàlia, format per l’església i l’edifici de Ca l’Artés, antic hostal del s. XV. El conjunt en si, s’integra en el anomenat el Turó de la Peira.

Sembla que tal com la veiem avui, els murs que fan de fonament i la uneixen a Can Basté, són de 1782. Està coronada per la creu de Santa Eulàlia, però aquest nom, ja es troba escrit en un document en el 991, que no era més que una escriptura de venda. La seva planta és de creu irregular (més gran a la banda esquerra), i és que rep l’herència d’anteriors construccions. En la seva capella hi ha vestigis d’origen románíc (s. X), i fins i tot materials aprofitats de l’època romana. 

El conjunt és un petit racó bellíssim que val la pena visitar un día, donant un passeig. Els deixo unes fotos del 1970 (quan hi havia la església gairebé en perpetuo desempar) i altres de l’actualitat, així podem fer una petita comparació.










16 comentarios:

  1. Queda pendiente, y para la semana que viene.

    podi-.

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  2. Que manía con los cipreses (será por aquello de que creen en Dios). A mí me parecen árboles fúnebres y bastante inútiles, puesto que al ser lanceados apenas ofrecen sombra. Además, si como es el caso, sube torcido, tampoco aporta nada bueno desde el punto de vista estético. Es solo una opinión.

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    1. No me extrañaría que formaran parte del conjunto de la iglesia y su cementerio, que como bien sabes siempre estaban aledaños a la misma hasta la orden de Carlos III, allá por el 1790, por motivos de higienización.
      De siempre, ese tipo de árbol, conocidos por las lágrimas de Dios, hicieron compañía a los difuntos. Gironella supo poner buen título a su obra.
      Salut

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    2. Los cipreses NO creen en Dios. Pero guaita que bonic: Su presencia en los cementerios se interpreta en el cristianismo como un puente para que las almas encuentren la vida eterna y la resurrección, en esa analogía con estos árboles frondosos y de forma ascendente.

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  3. Escribió J.Mª López Picó lo siguiente sobre un xiprer:

    El xiprer és com l'espectre d'una flama morta...

    Abrazo.

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  4. Es una zona muy querida, para mi, cerca de la plaza de Virrei Amat, donde me bajaba del metro, iba al mercado cercano( de la Mercè),para luego coger(con la bolsa de la compra),el paseo de Fabra i Puig en subida hasta Hedilla, en Horta. Tengo la satisfacción ,que siendo cordobés, me he "pateado", prácticamente toda Barcelona y parte de su Zona Metropolitana, en los 58 años que vivo en Cataluña.
    Como curiosidad, entonces, esa parte del paseo de Fabra i Puig, no había asfalto, calzada en tierra con baches. No me enrollo más, jejejjeje
    Saludos.

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    1. Ostras, Hedilla, el gran olvidado, Carlos.
      Por eso había una Falange que se llamaba "auténtica", y tenía poco o nada que ver con la de Paco.
      Curioso aquel barrio, también me lo he pateado yo.
      Un abrazo

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  5. Como si hubiera quedado un mini pueblito, en medio de la ciudad. Lo que hace más original y bonito el conjunto, es esa construcción adherida con un arco, en modo puerta de acceso a la zona. A mi sí me gustan los cipreses, mucho, me parecen unos árboles muy elegantes y además de ser muy longevos, son de los pocos árboles, por no decir el único, en sus diferentes variedades, que sobreviven a los incendios, siempre se le asocia con los cementerios, a pesar de ello me gusta, todo lo contrario que el crisantemo, que precisamente por ser usado mucho en los cementerios, con esas cosas que hacen con forma de cruces o pasteles horrendos, creo que es la única flor que no me gustas nada ; ) Un beso grande MIGUEL!

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    1. Correcto, correcto, María: "Como si hubiera quedado un mini pueblito", tal cual. Y es así, cuatro casas aledañas a la iglesia y poco más, pero dan señas de identidad de un barrio que ha quedado dentro del conjunto de la ciudad. Una cosa curiosa y bonita de ver.
      Un beso muy grande

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  6. En algún lugar, leí lo de " tenía cara de ciprés", para expresar ese dejo fúnebre que adornaba los gestos de algún personaje, no recuerdo dónde, Tot. Pero vayamos al encanto de una Iglesia, que luce esplendorosa junto a Can Basté, como una isla entre un conjunto de casas, más modernas, que se avizoran en el horizonte. Aparecen en la fotografía más antigua y por tanto de apariencia gastada. Dan ganas de sumirse por sus callejuelas, pasar por debajo del arco, o de entrar a recogerte en sus muros. Un saludo, Tot, buen comienzo de fin de semana. Cuídate.

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    1. Aquello huele a otra época, Sergio, y cuando se pasa por allí te sumerges en otra atmósfera.
      Un abrazo, muy fuerte.
      Salut, gracias por estar

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  7. Que ermita mas
    centrica , o al
    menos, es la
    impresion .

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