PARA TENER LA BOCA BIEN GRANDE HAY QUE TENER EL CULO BIEN LIMPIO. (P. Ruiz)

martes, 9 de diciembre de 2025

La eutanasia del rentista. (Un artículo para pensar)

 


Por Antonio Argandoña (*)

No es un invento mío; lo leí en Keynes, hace muchos años, y supongo que él lo había leído de otros antes. Al rentista, o sea, al ahorrador, lo estamos matando ahora, poco a poco, casi con dulzura, pero con perseverancia, en este mundo super endeudado.

¿Cómo se quita uno la deuda excesiva en la que ha incurrido en el pasado? Una solución es dejar de pagar, pero eso es demasiado costoso: pierdes el piso, acabas ante el juez, tus amigos te retiran el saludo… Puedes negociar una quita, una rebaja de la deuda, un aplazamiento del pago, un tipo de interés más bajo… si el acreedor está dispuesto a esto. Puedes pedir que otros se hagan cargo de la deuda: que tu suegro pague la mitad de tu hipoteca, o que los países ricos de la zona euro acepten hacerse solidarios de la deuda de los periféricos. Lo que se recomienda es practicar la austeridad: tratar de ingresar más y de gastar menos, vamos, apretarse el cinturón. No nos gusta, claro. O vender patrimonio para poder pagar.

Los países tienen una solución mejor (para ellos): la expropiación, total o parcial. Por ejemplo, provocando una inflación no esperada, que permite al deudor devolver la deuda en una moneda depreciada, a costa del acreedor. O mediante el mantenimiento de unos tipos de interés muy bajos durante mucho tiempo, con la colaboración de la Reserva Federal primero, del Banco de Inglaterra y el de Japón después y, más recientemente, del Banco Central Europeo. Así es como el acreedor va muriendo de inanición.

Y esto lo alabamos, quizás porque estamos pensando en el pobre propietario del piso, que lo va a perder, o en el país que tiene que practicar políticas restrictivas porque la deuda exterior, pública o privada, es demasiado alta. Al otro lado ponemos siempre al pérfido banco o al malvado fondo internacional. No se nos ocurre pensar que, detrás de estos, están los ahorros de, por ejemplo, los pensionistas de un país. Que a veces somos nosotros mismos (no se olvide que el Fondo de Pensiones de la Seguridad Social española está colocado casi íntegramente en la deuda pública española, política poco recomendable, porque es poner todos los huevos en la misma cesta, ya que el gobierno que debe pagar las pensiones es el mismo que debe pagar al Fondo con que se cubrirán las pensiones si el gobierno no paga).

Hace tiempo me pregunté por qué los alemanes siempre se oponen a las políticas de mutualización de la deuda pública europea (que todos los países sean responsables de la deuda de todos), o porque se preocupan por la inflación, o por qué no les gusta que el Banco Central Europeo aporte miles de millones a los bancos para que los tipos de interés se mantengan muy bajos. Respuesta: porque la posición neta de Alemania es la de acreedor, o sea, porque son esos ahorradores o rentistas cuyas colocaciones remuneramos a tipos de interés muy bajos.

(*) Antonio Argandoña es profesor emérito en los departamentos de Economía y Ética Empresarial.

Recibió su doctorado (summa cum laude) en Economía por la Universidad de Barcelona en 1969. Catedrático de Fundamentos del Análisis Económico (jubilado), ha impartido clases en las universidades de Barcelona, Málaga y Navarra.

23 comentarios:

  1. Miquel, la bajada del tipo de interés es una sanguijuela que chupa la sangre del ahorrador y esto ocurre tanto en la micro como en la macro economía. Hay que contener el gasto y evitar que suba la inflación. Todo es una cuestión de equilibrios y para esto están los economistas. Creo que el secreto está en mejorar la productividad y en rebajar la dependencia de otros países.
    Salud.

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    1. Te confieso que no sé nada de Economía, FRancesc Cornadó. Leo e intento captar y comprender los porqués.
      Estoy completamente de acuerdo en lo que nos dices: Creo que el secreto está en mejorar la productividad y en rebajar la dependencia de otros países.
      Un abrazo
      Salut

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  2. Hay economistas para todas las tendencias. Un beso

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  3. Uno de los problemas de este país es la baja productividad de los trabajadores y este 10% de paro endémico que somos incapaces de superar. La bajada de los tipos de interés no es ni buena ni mala, es necesaria, mientras se sea capaz de contener la inflación. Y yo qué sé, no soy economista, solo un ultracrepidiano más.
    Salut.

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    1. No es nueno Francesc Puigcarbó. Ya te comenté una vez, frente a un café, que en Sta María de Barberá, en una empresa de la que era responsable y que no llegaba a las doscientos personas, el último año de mi trabajo fue un fracaso, así me lo hicieron ver, y era cierto; de todo un año laboral no pude mantener la empresa a su ritmo total en cuanto a la actividad presencial porque ni un sólo día tuvo la empresa el 100% de los trabajadores en activo.
      Una abraçada
      Salut

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  4. La economía es una ciencia y debe ser muy compleja, pues a veces las predicciones se dan de bofetadas con la realidad, los economistas no se ponen de acuerdo con las recetas y cuando llega la crisis nos pilla a todos desprevenidos. Bueno, a todos no, que algunos sacan provecho del mal de muchos.
    Saludos

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    1. Dicen que es Ciencia, la verdad es que no lo sé. Pero es tal como lo comentas.
      Gracias, CAYETANO
      Salut

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  5. No sé qué hay de ciencia o de superchería en eso llamado Economía, que tiene dos caras: gestionar Estados y sociedades, y proporcionar beneficios a quienes más tienen y a algunos que quieren tener. ¿Ciencia?

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    1. Poco puedo responder, FACKEL, no sé la respuesta. De la Economía lo que decía mi madre, La Pepita, que todo sube como un cohete y baja como una pluma. Y eso parece que sucede ahora, pues habíamos llevado un tiempo tranquilo.
      Gracias por estar
      Salut

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  6. No entiendo un pijo de todos estos asuntos, soy un lego total. Pero estoy con La Pepita, tu madre: "todo sube como un cohete y baja como una pluma" (si es que baja).
    Un abrazo.

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    1. Yo tampoco entiendo, pero eso no quiere decir, Gran Uribe, que no lo note.
      Suelo leer todo aquello que sé, intuyo, me aclarará algo, y esta persona, mas o menos, me ha puesto en esa línea.
      También sé, eso es la experiencia, que toda revolución empieza por la inflación, y en consecuencia la nevera vacía.
      Fíjate, Álvaro, la rara sensación que tengo: presiento que este principio de 2026 va a ser como aquel principio del 1993. Creo que no nos damos cuenta de lo que hay en ciernes. Así, simplemente, que seguimos danzando y riendo. Ahh, desde hoy ya tiramos de Deuda Pública, porque no hay Presupuestos, y hay que cubrir los gastos no contemplados.
      Un abrazo

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  7. Que tal?, antes
    que nada, me
    alegro que
    estés
    recuperado del
    todo.
    Soy otro, que no entiende del
    asunto, más, cuando se es de letras,
    lo que si tengo claro, es el dinero que se nos está yendo, entre el que se llevan fresco nuestros "queridos" mandamases, y luego, a los que vienen de fuera, a vivir mejor que nosotros, luego , los panfletarios
    de El País , sacan un suplemento
    que se llama , por qué los jóvenes se
    vuelto de derechas, en realidad,lo
    mejor , es no ser de nadie, total , todos
    van a lo mismo, un saludo, y disculpa
    la tabarra .

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    1. Del todo, del todo, todavía no, aún estoy en tratamiento, pero es otra cosa.
      Gracias, Orlando.
      A medida que vayas cumpliendo años te darás cuenta de que en realidad es lo que decía el de la "casta" hasta que entró en la rueda y dejó de llamarlos así, y no te sentirás representado porque te llevarás un desengaño.
      Nada de tabarra.
      Bienvenido al club.
      Salut

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  8. Jajaja. Si El País es panfletario no sé qué es la televisión 13 y la radio COPE de la Iglesia, El Mundo, La razón, Abc, La Gaceta, los digitales OKDiario, The Objective y un montón de los que se creen hacen periodismo y son nefastos. Esos no son Panfletarios no, son INCENDIARIOS a tope.

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    1. Cada uno de un color,
      no te creas que me
      arrimo a alguno .

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    2. Pero se reconocerá, Anónimo, que en el mismo lado te encuentras con la TVE (que debería ser plural porque es pública) con periodistas puestos en de marcada tendencia nada equidistante al sanchismo, como el tal Cintora, o el cual Broncano.
      Sí se habla de lo privado, vamos directamente al de la Angelica Rubio, (hoy con asiento de consejera en TVE). Y así si se desea podemos pasear por los cientos que digitales que hay en España de todos los partidos y tendencias.
      Nada que sorprenda a nadie porque nadie ya se cree nada, que es, al final, de lo que va la cosa.
      El gran problema, Anónimo , que se tiene, es que se mira al crecimiento de la ultraderecha culpabilizando a la derecha, cuan hay, y se sabe no por Tezanos, por supuesto, que una fuga de votos en cantidad de un cuarto de millón, del Psoe a Vox.
      ¿Cuál es el problema?, que la izquierda, esta izquierda sanchista que gobierna, no quiere reconocer el problema.
      Ya dije en una ocasión en casa amiga, que esto se pagará caro, y que no reconocer de inmediato y expulsar del partido (porque no interesa) ipso facto a tanto corrupto, metemano, putero, chorizo y estafador emocional hundiría a la verdadera socialdemocracia en un pozo.
      Mientras, podemos continuar diciendo lo malo que son los otros sin aceptar como son los nuestros.
      Un saludo

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  9. Una reflexión interesante, creo que he ido teniendo suerte y capenado, más o menos las últimas crisis por eso, por ser una persona ahorradora y, claro, por tener algo de suerte. Pero siento que ahora empiezan a atacar a eso que comentas, al ahorro, parece que no se quedarán a gusto hasta que no vivamos en un ciclo de deuda perpetua del que sea imposible salir...

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    1. Mi apreciado BEAU. No teniendo Ni p idea de Economía, me di cuenta de un detalle hace unos pocos años. Te explico: Me di cuenta de que borraron los nombre de "AHORRO" de cajas y bancos, y que aquello tenía tendencia a desaparecer.
      Hoy los bancos son de PRESTAMO, pero nadie te premia por ahorrar, antes bien, te dicen que así perderás dinero, tan siquiera nadie mantiene el coeficiente paralelo de inflación, o sea darte un porcentaje igual a la inflación, simplemente porque no interesa, lo que quieren es que lo muevas y lo gastes. Así no hay cultura del ahorro, ni cerdito que valga la pena.
      Gracias por pasarte

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  10. Voy a ser académico pero es que el tema planteado tiene sus bemoles.

    El texto ofrece una reflexión lúcida sobre el conflicto estructural entre deudores y acreedores, que es, en realidad, una tensión entre dos racionalidades económicas opuestas: la que fomenta la deuda y el consumo frente a la que valora el ahorro y la prudencia financiera. Está escrito desde una lógica keynesiana moderada, aunque introduce una crítica a la degeneración de las políticas monetarias contemporáneas —esas que, bajo apariencia de estímulo, castigan el ahorro.

    El autor denuncia cómo el mundo actual —dominado por políticas de crédito barato y deuda pública desmesurada— ha abandonado la lógica económica clásica del ahorro como motor de inversión y estabilidad. Al mantenertipos de interés cercanos a cero o incluso negativos, los bancos centrales fomentan el endeudamiento y desalinean el ahorro.

    El resultado es un traslado silencioso de riqueza desde los ahorradores (rentistas, pensionistas, fondos de inversión conservadores) hacia los deudores —principalmente Estados y grandes corporaciones—. La inflación inesperada y los tipos reales negativos actúan como una expropiación encubierta del capital ahorrado . En un lenguaje moral, podría decirse que el sistema “devora” a los prudentes para sostener a los imprudentes.

    La retórica pública suele empatizar con el deudor —ya sea una familia con hipoteca o un Estado periférico asfixiado—, mientras demoniza al acreedor. Sin embargo, el texto recuerda que el acreedor no siempre es un especulador sin rostro: muchas veces encarna al jubilado que confió sus ahorros al Estado a través del Fondo de Pensiones oa pequeños ahorradores que compraron bonos públicos.

    Esa confusión moral es funcional a una economía basada en la expansión infinita del crédito, que necesita justificar la erosión del ahorro como si fuera una política social progresista.

    La referencia a Alemania ilustra la posición estructural de los países acreedores frente a los deudores. Alemania defiende la estabilidad de precios y se resiste a mutualizar la deuda precisamente porque su modelo se basa en el superávit y la acumulación de ahorro. Las políticas de mutualización o de tipos ultra bajos la perjudican directamente: reducen la rentabilidad de sus activos y desincentivan su disciplina fiscal.

    Este contraste cultural y económico —alemán “ahorrador” frente a sur europeísta “gastador”— revela dos visiones de la economía: la del esfuerzo y la contención frente a la del crecimiento a crédito.

    Desde la lógica de que “quiere promover el ahorro y no la deuda”, el texto plantea una crítica de fondo: el sistema económico contemporáneo está minando los fundamentos de la estabilidad a largo plazo. El ahorro —base del capital disponible para inversión productiva— se disuelve en un clima de represión financiera dirigida por los bancos centrales. Se sacrifican los incentivos al ahorro en aras del crecimiento inmediato, generando una economía permanentemente dopada por la liquidez barata.

    Esa lógica del endeudamiento perpetuo puede sostener el consumo a corto plazo, pero degradar el tejido moral y económico de las sociedades: desincentiva la previsión, castiga la prudencia y desplaza la responsabilidad individual al Estado o a las instituciones financieras.

    Fin de la especulación financiera.

    Un abrazo, Tot, vuerto de Sevilla, tierra del flamenco.

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    1. ¿Ha hecho un buen trabajo Pedro Manzano con la Macarena? Los sevillanos, sevillanas y sevillanes parecen emocionados.

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    2. A vé, mi arma¡¡¡ que has venio mas ilustrao que la Sopena.
      Ante todo darte las gracias por la magnífica visión y su correspondiente explicación. Había visto el asunto, pero no tan nitidamente.
      Mira, me ha llamado la atención lo que me comentas del ahorro alemán, la cultura, frente a lo quees la costumbre del dispendio "de la casa", tanto es así que uno, cliente del Deuche Bank, uno de los pocos bancos que promueven el ahorro premia, si así se le puede llamar, el ahorro a 12 meses sin necesidad de tener cuentas, nóminas, acciones, seguros o pólizas con ellos. Tienen un plan Market, que le llaman, que da el 2´10%/año. Ningún banco español se acerca, de tal manera que el BBVA, el que dice que da algo si ahorras, te da el 0´90%/año a partir de 10.000€ y siempre que tengas domiciliaciones, nóminas y demás.
      Esa es la diferencia entre la mentalidad alemana y la española.

      Te agradezco enormemente lo explícito de tu argumento, pues les puedo explicar a mis nietos el porqué del asunto, y con tu manera de resumirlo me ha ido de fábula.
      Me alegro de leerte, de ver que has venido con bien y de que me hayas escrito.
      Un abrazo y salut

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    3. Pregunté en Triana por la restauración de la Macarena -algo que nunca se debe preguntar a un trianero- y me dijo el hombre enamorado de la Virgen de la Estrella que habían hecho algo que él veía peligroso al haber cambiado el velo del rostro de la Virgen que era el que la gente amaba, y que no lo aceptaban. Ha habido más cambios pero el descontento es generalizado. Sevilla es muy tradicionalista y no quiere revoluciones estéticas..

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