Los sábados suelo poner pinturas y pintores que me atraen.
Hoy les presento a Jesús Mateo, un muralista que creo, les agradará tanto como a mí.
Tiene en Alarcón, Cuenca, y dentro de la nave de una iglesia, lo que creo es el máximo exponente de su obra.
Les dejo con él:
https://www.muralalarcon.org/
De pintura no me gusta opinar, simplemente me instalo en él me gusta, no me gusta. Y este me gusta.
ResponderEliminarSalut
Personalment m' agrada. És diferent i té personalitat.
EliminarSalut
En mi caso, opinar sí que puedo o me gusta, pero jamás de los jamases «criticar, valorar o comparar» Incluso de fotografía, que se supone que debería entender un poquito más que del resto de las artes gráficas, intento no caer en eso. Como dice Francesc, con el gusta/no gusta es más que suficiente.
ResponderEliminarEn este concretamente me gusta la paleta cromática y me llama mucho la atención (probablemente era la intención del artista) ese destacado color cian de esa botella situada bien cerca de uno de los puntos fuertes de la composición.
Si, cert, detalle a tener en cuenta, Ricard.
EliminarSalut i bon dia
Me gusta, de Jesús Mateo sólo tenía noticia del mural que hizo en Alarcón. Muchas gracias por traerlo aquí.
ResponderEliminarSalud
Si, creo que es un artista no muy conocido, y que vale la pena sacarlo a colación.
EliminarUn abrazo
Salut
El muralismo y la nave pintada en Alarcón me evocan el arte románico. No lo conocía, pero me gustaría ir a ver esta capilla que merece la pena. Salut.
ResponderEliminarNo deberíamos pasar de largo, Joselu, hay algo especial.
EliminarEstoy de acuerdo
Un abrazo
Salut
Me recuerda un poco el expresionismo de Franz Marc y sus naturalezas muertas, sólo que sus bodegones eran mucho más coloristas y en perspectiva, aquí aparece sobre un fondo marrón con reminiscencias cubistas, un bodegón plano. Parece una mezcla de cubismo y el expresionismo, ambos trataron la realidad a través del juego de perspectivas y el colorido atrevido distorsionando la realidad, que siempre pintaban como aparecía en su mente, no como se apreciaba de verdad.. Curioso este cuadro, sin duda.. esos colores brillantes de la fruta son los que le dan la vida, muchas gracias MIGUEL, beso grande y buen finde!
ResponderEliminarSi, cierto, tira más de expresionismo.
EliminarNo lo tenía bien situado, María. Lo que me agrada es la combinación de colores, que no la encuentro estridente y hay algo de ellos que me atrae.
Las gracias a ti por estar
Un beso ¡
Estuve hace muchos años (más de treinta seguro) un par de noches en el castillo de Alarcón, asomado a una hoz, creo que del Júcar. Era el Parador antes de que lo remozaran y lo convirtieran en de lujo. Era un lugar precioso y evocador. Del pueblo recuerdo la plaza, con el Ay Untamiento y sus arcos carpaneles. Al lado, una iglesia que estaba cerrada. Supongo que es allí donde luego Jesús Mateo pintó los murales. Si vuelvo por Alarcón, no se me pasará por alto, vive Dios.
ResponderEliminarUn saludo.
Ahhhhh despiertas mi envidia, sí, esa que es insana, fruto de una mente perversa y quebradiza.
EliminarVive Dios, don Gonzalo, que amenazarme a mí, en ir y no comentar, es como amenazar un león con un mal palo.
Nos vemos en el patio de armas ¡
Un abrazote ¡
Don Gonzalo: ¡Insensatos! ¡Vive Dios que a no temblarme las manos a palos, como a villanos, os diera muerte a los dos!
EliminarQue bien fablaís don Uribe,
Eliminarenvidia tengo de vos,
se me agrieta hasta la voz
y si soy yo quien recibe...
!enseguida toco el dos ¡
Me parece un autor muy a tener en cuenta, y sus obras tienen ese brillo de los grandes genios del arte. Me recuerda a muchos autores que están en la mente de todos. Muchas gracias, Tot, por asomarnos a un remanso de paz, qué es lo que nos transmite las obras de Jesús Mateo. Un abrazo y cuídate.
ResponderEliminarPues te aseguro que es una cuenta pendiente el verlo en directo, SERGIO, creo que los colores y las formas adquieren la dimensión que se merecen, así, me gusta, ya no imagino verlas dentro de la nave de la iglesia, ha de ser bárbaro.
EliminarUn abrazo
Salut y te me cuidas
Voy a ser sincero, a mi no me gusta mucho esta pintura, la verdad. No me dice nada.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues perfecto...No pasa nada, porque puede gustar y también puede no gustar.
EliminarUn abrazote