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ResponderEliminarSaludos,
J.
Fantástica película, hace muchos, muchos años que la ví y es una obra maestra, con pocos medios y mucha fantasía.
ResponderEliminarAbrazos y buen domingo.
Todo un hito, como Metrópolis o El acorazado Potemkin.
ResponderEliminarSaludos.
Es toda una declaración de intenciones, y está muy bien realizada para ser la primera, JOSÉ A GARCIA
ResponderEliminarSalut
Es muy , muy bonita. Inocente, diría, MTRINIDAD. Para ser de las primeras tuvo su encanto.
Un beso y buen día
Cierto, CAYETANO, tiene partes muy entretenidas, y supongo que para la época era el no va más.
salut
Fan anys que la vaig veure, és com Metrópolis, són pel·lícules molt avançades al seu temps, amb els mitjans que tenien suplerts per la imaginació, i també una certa dosi d'innocència.
ResponderEliminarSalut
Cert, FRANCESC PUIGCARBó. Molta inocencia. Molta. Avui sería impensable.
ResponderEliminarsalut
Desde entonces las maravillas se han multiplicado casi infinitamente en cine. Por supuesto, también hay que buscarlas, no es maravilla cuanto reluce en el negocio cinematográfico. Pero sí significativo de la cultura, de las zonas del mundo, de la imaginación de autores, de las técnicas evolucionadas, de la calidad o su opuesto. Por cierto, creo que se cumplen cien años de otro icono del cine: El chico, de Chaplin.
ResponderEliminarNo soy especialmente cinéfilo, FACKEL, pero se reconocer donde hay algo que mueve a observar.
ResponderEliminarMe recomendaron esta semana una película que me dejó pasmado, TIGRE BLANCO, es rusa y se puede ver en Youtube subtitulada.
Es de guerra. El final es digo de Vox. La he visto una vez, y la he visionado lentamente, otra.
Si puedes pásatela a ver. No te arrepentirás. Haz de verla hasta el final. Allí descubrirás el motivo del "tanquista".
Salut
En Netflix,hay una peli muy buena TIGRE BLANCO,de la India con un fuerte contenido social,seguro que te gusta.La que dices,es rusa muy buena.Me gusta el cine belico ruso,por los medios que ponen,tanques,aviones...Escenas de guerra muy conseguidas y personajes muy ingenuos,nada que ver con sus homólogos americanos,que valoran más la brutalidad.
ResponderEliminarSalud
He pasado 15 minutos de lo más divertido ¡Muy buena!. Gracias.
ResponderEliminarAbrazos.
Correcto, esta rusa , CAR RES, es realmente buena, y yo no soy cinéfilo.
ResponderEliminarUn abrazo
Es que al menos hace cierta gracia y no hay tropelías ni paradigmas, ni muertes, ni desesperos. Hay ingenuidad, CONCHI, y alguna sonrisa.
Gracias a ti por estar
salut
Tiene el encanto de los inicios, de la inocencia, de lo realizado con imaginación con falta de medios técnicos. Es la mirada ingenua lo que nos atrae de ella. Salut.
ResponderEliminarComo dice Joselu, guardan el aroma de los pioneros. Grande, Tot, por rescatar a este cineasta, hoy afortunadamente más conocido. Yo llegué a Méliès a través del personaje de Scorcese, en su filme Hugo. Conocido como un mago,cuenta la leyenda, que George quiso comprarle este innovación a los hermanos Lumiere, que no creian que su invención tuviese más recorrido que el documental. Por casualidad, además, el mago del cine como fue conocido entonces, descubrió los efectos visuales. En una de sus filmaciones, una parte de la cinta se deterioró y al cortarla y unir la película, se dio cuenta que uno de sus personajes, desaparecía como en una ilusión. Jugó con esos efectos, hasta lograr su obra maestra, que hoy nos muestras.
ResponderEliminarPoco a poco, sus creaciones fueron perdiendo el favor del público. Más modestas que las de los estudios nórdicos y sobre todo los italianos, que con unos exteriores como los de la Antigua Roma, fundaron la superproducción histórica. DW Griffith beberia de esos predios, para su famosa El nacimiento de una nación.
Y Méliès, arruinado, se retira. Se casa con la actriz fetiche de sus producciones. Se envuelve su figura de un manto de olvido, hasta que un editor que recuerda esas emisiones en el Teatro Houdini, le rescata de su ostracismo.Lo encuentra como quiosquero de una estación de tren. Se le homenajea como se debe, y vuelve a ser una celebridad patria. Ese editor que fue niño, recordaría seguro a esa luna, que proterva recibe a tan extraños visitantes. Un abrazo, Tot.
Cierto JOSELU. Muy cierto.
ResponderEliminarUn abrazo
No sabía nada de lo que nos comentas, pero pone punto sobres ies en la entrada, SERGIO MUNARI. No soy cinéfilo, pero admiro ciertas obras por su arte y su calidad, y esta tiene algo especial, además de ser pionera.
Te agradezco toda la aportación que nos has dejado.
Un abrazo
salut
Ya sabes, Miquel, que nunca voy al cine, pero creo haber visto esta película en una exposición que se celebró en el CCCB, de esto ya hace muchos años.
ResponderEliminarAbrazos
Francesc Cornadó
Es de lo más curiosa, FRANCESC CORNADó. Tampoco yo soy cinéfilo, pero esta me atrajo.
ResponderEliminarUn abrazo
Guarda esa esencia genuina del cine cuando era más arte (las artes escénicas), que mercadotecnia.
ResponderEliminarBien traída, amigo Miquel.
Salut!
Tal como dices, PACO CASTILLO.
ResponderEliminarGracias por estar.
Un abrazo