...aquellos que ponían "Colmado", vaya a saber si se titulaban así porque en aquella época todo era escaso, y mirar aquellos anaqueles rebosantes de latas, daban la idea de "colmado de todo". Nunca lo sabré.
O la belleza de encontrarse con un cartel de: "ultramarinos", nombre evocador, con ínfulas de exquisiteces traídas del otro lado del mundo.
O leer en letras doradas lo de "Comestibles finos", intuyendo que no sólo se referían al cabello de ángel, sino a la selección de lo expuesto.
Aunque la duda delante de este siempre me perseguirá: ¿Venderá diamantes?
¿Y qué diferencia habrá entre el coser y el zurcir?
¿Y qué clase de plumas venderá este señor?...¿y quién se viste con plumas?...preguntas que me asaltaban
¿Y por qué unos son naipes, otras son cartas y lo demás barajas?...Es que los carteles invitan a la confusión
Pero antes...al limpiabotas
Sin dejarnos aquello que fue esencia:
Una colección para el recuerdo,
ResponderEliminar¡Qué pena que se estén perdiendo!