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Parecía una vida totalmente ordenada y armónica.
ResponderEliminarpodi-.
Hasta que vino la aborregADA que destruyo Barcelona
EliminarPero es película.
EliminarSalut, Podi
Ahora ya no está. Veremos no que depara el futuro
EliminarSalut
Hay que mirar,la actualidad,el futuro,hacerlo atrás es convertirse en estatua de sal(Génesis).
ResponderEliminarSaludos
No se lo que viene, lo averiguaremos pronto.
EliminarSalut
Muy buen vídeo, me ha recordado tiempos de mi infancia, todo parecía más plácido y la gente más educada. Había coches y animales grandes por las calles, ahora hay coches y animales pequeños.
ResponderEliminarSalud
Jejejeje, animales siempre los ha habido.
EliminarUn abrazo
Salut
Como documento reducido de carácter antropológico está bien. Veinte años después de que el franquismo ganara su guerra la impresión -y eso que es Barcelona- es de atraso y a su lado no te cuento lo que la mayoría de las ciudades españolas eran. Que la melancolía personal no nos oculte aquel período, que no todo sea creer que lo existente es lo que parece, que no se olvide cómo se las gastaba un régimen de corruptos y criminales. Porque si no tenemos en cuenta todos los factores existentes mal vamos.
ResponderEliminarCada uno recordara las cosas como quiera recordarlas faltaria mas
EliminarEs un simple documento, sin más.
EliminarSalut
Tiempos de infancia.., bueno de bebé.
ResponderEliminarMiquel hace tiempo que no escribe Mª Trinidad espero que este bien.
Estimado, MTrinidad hace tiempo que no escribe, hace unos meses se encontraba mal, cuando fue a vivir a Sabadell ya estaba en peores condiciones de salud, hoy ya no se encuentra entre nosotros.
EliminarUn abrazo
No sabia del fatal desenlace - Descansa en Paz Mª Trinidad
EliminarCuando cambió de piso, de Barcelona a SBLL, le puse en contacto con el de las mudanzas, el Rojals, una persona que conozco y que es pura ética en su trabajo. Seguíamos hablando , ella me telefoneaba junto a su hijo, los fines de semana, pero no se encontraba bien de salud. Hace unos meses nos ha dejado de escribir.
EliminarLa encuentro a faltar.
Un abrazo Anónimo...y no veneciano
Recomiendo "Ni una, ni grande, ni libre", libro del historiador Nicolás Sesma, editado por Crítica. Descubre muchas cuestiones que sabíamos a medias o no teníamos ni idea o sencillamente las habían contado al revés. Nos viene muy bien a quienes hemos vivido un tiempo de aquella oprobiosa dictadura.
ResponderEliminarHaremos un hueco e intentaremos leerlo.
EliminarGracias
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEliminé el anterior porque había varias erratas ortográficas, y eso no me gusta que ocurra. Ahora está corregido todo, creo:
ResponderEliminarMe ha dado mucha pena eso que dices de Mª Trinidad Vilches. Sus comentarios entrañables y muy madrugadores, últimamente desde Sabadell, que siempre acababan con un pequeño parte meteorológico, no faltaban nunca a la cita. La había echado en falta desde el 10 de febrero, cuando hizo un comentario a tu entrada sobre el Yogourt, que ella completaba con un enlace a una entrada que hizo ella hace años sobre este mismo tema en su blog, ya desaparecido (mtvo-bcn.blogspot.com).
Ese último comentario que te hizo (ya no hubo más en tu blog) está en el enlace:
https://totbarcelona.blogspot.com/2024/02/cronica-de-una-muerte-anunciada-danone.html?showComment=1707548675957#c9160985607916624885
Respecto al video, me ha gustado, con esa proliferanción de carros transportando de todo. Recuerdo perfectamente todo ese ambiente y he visto lugares por los que pasé bastante. Ahora esos carros, caballos y burros son furgonetas y bicicletas diversas, sobre todo las que llevan una caja amarilla detrás. Estuve una hora anteayer sentado en un banco de Consell de Cent, esperando a doña Perpetua, que estaba en el médico, y observando todo. Pues bien, pude darme cuenta de primera mano de que la presunta isla verde pacificada se ha convertido, al menos en el rato que estuve, en un verdadero carajal a ciertas horas. Furgonetas aparcadas, otras circulando, coches en tránsito, bicicletas de reparto a toda leche y de deportistas, patinetes, todo en ambas direcciones, sin control alguno. La parte central convertida en una especie de carril bicicleta-patinete-motocicleta-furgoneta. Y los peatones, asustados, teniendo que circular junto a las fachadas, como hacían antes por las aceras. Y, pobre de ti si quieres cruzar a la otra banda sin mirar. Cuando había coches, sabías que tenía que llegar hasta el semáforo y allí lo hacías seguro. Ahora, si te confías, acabas en la ambulancia.
Perdón por la longitud. Casi parezco Sergio Munari... Un abrazo
No tengo confirmación efectiva del hecho, Gran Uribe, pero he seguido toda su enfermedad, hacía más de quince años que cada día nos escribíamos y os llamábamos, supe de un empeoramiento, la llamé tres veces, me contestó la primera para decirme que estaba muy mal. Después, hace ya tiempo, y a pesar que la he llamado muchas veces, ya no volví a tener noticias. Me comentó en su momento que estaba ya en un término final.
EliminarNo puse nada por educación y prudencia. Todo me induce a pensar que ya no está entre nosotros.
Un abrazo
Lamentablemente,
ResponderEliminarsin dictadura,
asistimos a
acontecimientos,
como que este
gobierno, quiere
controlar a los
medios,supongo
que El País y la
Ser, estarán
exentos , que
lo único que
saben hacer,
es la rosca, al
okupa de
Moncloa, quién
por cierto, la
de corrupción
que oculta, los
que lo pueden
hacer, están
tardando, el
problema no
es ser de
izquierdas o
derechas, sino
el sillón, ese
que en España
no suelta nadie.
En los 80, España
dejaba atrás el
régimen, y había
mas libertad que
hoy , y en los 90,
lo mismo, y otra
cosa , soy otro
que he extrañado
a María Trinidad,
lo siento por sus
allegados .
Un abrazo, Orlando.
EliminarSalut
Vaya... Siento la pérdida de Mª Trinidad, me encantaba su espontaneidad. Una pena.
ResponderEliminarAbrazo, Miquel.
La noticia me llegó por una fuente que considero muy fiable, ya hace tiempo, Paco Castillo, y como con ella tenía conversaciones por teléfono muy a menudo, me comentó de que se encontraba mal, me explicó de su enfermedad y quedó todo bajo llave.
EliminarHe llamado a su teléfono en muchas ocasiones, sin obtener respuesta, y doy por sentado que lo que me dijo, que era muy serio, se ha hecho realidad después de más de medio año.
Un abrazo
Cuenta que nos llamábamos casi día sí y dia no, y que incluso le puse en contacto con el señor de la mudanza, que con ella tenía, después de más que quince años cotidianos, mucha confianza y que sabía de su enfermedad, que era seria. Pero he guardado silencio hasta hoy que ha salido el tema, sino no hubiera dicho nada.
EliminarUn abrazo fuerte
Las Islas de la Colau,no lo son,puesto que se ven en toda Europa.Incluso en Córdoba, que también costó su tiempo.Los niveles de contaminación de Barcelona centro,tienen que cumplir las normativas europeas,algo que va muy bien para los que viven en esa parte de la ciudad.Ahora,con el nuevo equipo está por ver lo que hace,porque el compromiso es el mismo,de lo contrario la multa es grande.Que no asuste al personal con las navajas y que digan qué harán.
ResponderEliminarSaludos
Ahora estoy desligado de la problemática de Barcelona, Carlos, no sé hasta que punto será o no bueno lo de las islas, dado que el resultado tarda de verse, al menos tres o cuatro años.
EliminarLo de las navajas se verá, si es que se hace, de forma casi inmediata, eso sí, pero veremos que normativa se usa y si a los detenidos los sueltan a las 24 horas.
Veremos, veremos, ahora para La Merçe lo sabremos.
salut