Pero los fascistas, claro, siempre son los otros.

martes, 13 de abril de 2021

El uniforme de cocinero sigue allí

 Desde los años de la prosguerra hasta los días de ahora, muchas son las generaciones que han paseado bajo el sombrero del cocinero. 

Más he de decir que, habiendo cambiado el nombre, la firma y la forma, lo básico no ha cambiado, sigue siendo el cocinero, su sombrero y su porte, las señas de identidad de la tienda. Es de agradecer.
Calle Hospital 67. Barrio del Raval

Des dels anys de la prosguerra fins als dies d’ara, moltes són les generacions que han passejat sota el barret del cuiner.
Més haig de dir que, havent canviat el nom, la signatura i la forma, el bàsic no ha canviat, segueix sent el cuiner, el seu barret i el seu port, els senyals d’identitat de la tenda. És d’agrair.
Carrer Hospital 67. Barri del Raval





11 comentarios:

  1. https://xurl.es/78m8g

    Se ve el cocinero estupendamente.
    Hasta luego Miquel, a las 19 horas.
    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Guaita'l, està ben content i conservat el cuiner. Bona cuina!


    Salut

    ResponderEliminar
  3. Se ve que es la señal que identifica la tienda frente a otras, por eso conservan la idea a pesar del paso del tiempo.
    Un saludo, Miquel.

    ResponderEliminar
  4. - Es una seña de identidad : me acuerdo cuando iba con una de mis abuelas a la mercería Santa Ana a comprar abalorios y justo se pasaba por este comercio .

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Hay muchos que odian los uniformes, pero a mí me chiflan. Me gustaba ver a los carteros, a los ferroviarios, a los conserjes, a los estudiantes, etc, etc, con uniforme... Se ha querido evitar la solemnidad y la formalidad y se ha acabado casi totalmente con ellos, pero agradezco que todavía en alguna profesión continúen. Parece que son solo admitidos en las fiestas, sease los sanfermines en donde todos van con el mismo atuendo y eso es guay. O en las manifestaciones nacionalistas donde todos llevan la misma capa, y eso es patriotismo (del bueno).

    ResponderEliminar
  6. Ese maniquí-cocinero me vio crecer a su sombra. Formaba parte de mi paisaje, junto con la sastrería Casarramona y la farmacia Carreras.

    Pocos son las tiendas que quedan de aquella época en el barrio, creo que solo esta y la cerería de la Plaza del Padró.

    ResponderEliminar
  7. La identifica, cierto, CAYETANO
    Un abrazo
    Salut

    jejeje, BERTHA, somos dos...ostras...allí me compraron los primeros tejanos con cremallera , tendría doce años más o menos..
    Salut

    JOSELU, lo del uniforme tiene su miga, si. Antes los de la mili, los urbanos y los bedeles de los bancos, todos uniformados, junto con los acomodadores de cine y los basureros, que también lo llevaban.
    Hoy para uniforme nacionalista queda el pensamiento único, que siempre es uniforme y tradicional.
    Un abrazo

    Si la Abelló y paca cosa más, RODERICUS...ahh si la librería Dávila, donde me compro los libros de segunda mano..Está de siempre
    salut

    ResponderEliminar
  8. Está la mar de maco, FRANCESC PUIGCARBó ¡¡
    salut

    ResponderEliminar
  9. Hasta luego, MTRINIDAD¡¡
    Gracias por el enlace ¡
    salut

    ResponderEliminar
  10. Me temo que ha habido mucho cambio de imagen de un comercio a otro. Pero si se mantiene el género...que sean felices y sobrevivan.

    ResponderEliminar

Lineas de metro del Imperio Romano

 Me lo ha enviado mi hijo. Me ha gustado cantidad. Me imagino como el Pequeño Príncipe, sentado en su pequeño asteroide, mirando Europa con ...