Les dejo con tres limpia-zapatos que siguen manifestándose en la Gran Vía con todo su esplendor.
Los dos están alojados en fincas diferentes. El primero se situa al comienzo de un largo pasadizo, que es donde se supone se podía alojar el carruaje del dueño de la finca, porque incluso tiene aceras laterales. El segundo, el de doble peana, está al fondo de la entrada, justo al comienzo de las escaleras. Son fincas regias, levantadas en los albores del 1.900, donde cada una contaba con su correspondiente portería, que se encargaba de la limpieza del recinto.
Debemos de tener en cuenta de la circunstancia de que en aquellos tiempos habían algunas calles adoquinadas, otras eran simplemente de tierra y ninguna asfaltada.
El primero es de única peana central, profuso en ornamentación. El segundo, de soporte de doble peana, más sencillo, pero igual de práctico.
El tercero es especial, tan especial que fue diseñado por obreros para uso y disfrute antes de subir los peldaños de su casa. Tan es así que está fuera, a pie de calle, porque la entrada de la vivienda no es la típica de recibidor de carruajes, sino la de una finca normal, de justos "posibles". El barrio donde está ubicado lo requiere, es el humilde Poble Sec, a pie de la montaña de Montjuïc.
Els deixo amb tres neta-sabates que continuen manifestant-se en la Gran Via amb tota el seu esplendor.
Els dos estan allotjats en finques diferents. El primer es situa al començament d'un llarg passadís, que és on se suposa es podia allotjar el carruatge de l'amo de la finca, perquè fins i tot té voreres laterals. El segon, el de doble peanya, està al fons de l'entrada, just al començament de les escales. Són finques règies, aixecades en les albors del 1.900, on cadascuna comptava amb la seva corresponent porteria, que s'encarregava de la neteja del recinte.
Hem de tenir en compte de la circumstància que en aquells temps havien alguns carrers empedrats, unes altres eren simplement de terra i cap asfaltat.
El primer és d'única peanya central, profús en ornamentació. El segon, de suport de doble peanya, més senzill, però igual de pràctic.
El tercer és especial, tan especial que va ser dissenyat per obrers per a ús i gaudi abans de pujar els esglaons de la seva casa. Tan és així que està fora, a peu de carrer, perquè l'entrada de l'habitatge no és la típica de rebedor de carruatges, sinó la d'una finca normal, de pocs "possibles". El barri on està situat el requereix, és l'humil Poble Sec, a peu de la muntanya de Montjuïc.
(I) Peana central
(II) Doble peana
(III) Sin ornamentos, incrustado en la pared.
Tal ha sido la vida del obrero… una existencia sin ornamentos.
ResponderEliminarEn cualquier caso, los otros limpia-zapatos son una bonita creación.
Salut, Miquel.
Una buena metáfora, PACO CASTILLO, una existencia sin ornamentos.
ResponderEliminarSi señor
Un abrazo
Salut
¿No has pensado que se les deberia definir o decir limpia suelas de zapatos? porqué aquí el zapato no se limpia. Lo sé, es un comentario gilipuà de un 11 de septiembre. Aburrido que anda uno a esta hora de la mañana.
ResponderEliminarPos si, limpia suelas queda "más mejor" FRANCESC, pero supongo que como soy sino el único, si uno de los pocos raritos que les hace fotos, pues los bautizo a mi manera.
ResponderEliminarTal como dices les llamaremos limpia-suelas
Molt bé, cireré ¡¡
Bon dia pandémico ¡¡
Salud, cazador de limpiazapatos. Que, por lo tanto, lo eres también de puertas, portales, fachadas, zaguanes, escaleras, techos estucados y demás armoniosa perfección de mil y un oficios que coincidían en aquellas casa vetustas. Un abrazo .
ResponderEliminarTres formas distintas, de más a menos posibles, tres formas de vivir. Felicito tus dotes de observador. Bravo.
ResponderEliminarTambién felicito a Paco Castillo por su buenísima metáfora.
Salud en este día normal de pandemia, de unos virus y otros.
Francesc Cornadó
Gracias, Francesc Cornadó. Un placer saludarte.
EliminarSalud.
Salut FACKEL!!!
ResponderEliminarTres formas de vivir, si, FRANCESC CORNADO.
Un abrazo
Salut
Hasta en los limpiazapatos, se notan las clases pudientes...!!!
ResponderEliminarEresun crak, querido Miquel, non dia i bona diada.
Petons.
La verdad es que hasta para limpiarse la suela de los zapatos hay clases aunque en la calle todos pisemos lo mismo. Siempre ha sido y continuará sucediendo. Me encanta que nos traigas cosas curiosas.
ResponderEliminarAbrazos.
El devenir de los tiempos hará inútiles todos estos artilugios así como a los limpiabotas. Todos terminaremos por llevar bambas y descuidaremos nuestro calzado. Salut.
ResponderEliminarSi que se notan, MTRINIDAD, incluso de los materiales de que están hechos, los hay de hierro dulce, de hierro colado, algunos de acero (pocos); los hay forjados, con oropeles, lisos, de peana, de peana doble...y todos con su correspondiente portero/a para que quitaran el barro que depositaban los señores.
ResponderEliminarPero hete aquí que nos hemos encontrado con un humilde limpia suelas de obrero a pie de calle, y este, simple y práctico, nos ha llamado la atención.
Por cierto tengo otro similar que algún día pondré, del barrio de Horta.
Un beso bon día ¡¡¡
Las hay CONCHI, de cosas curiosas. Y si que se notan las diferencias sociales con minucias; como decía Serrat, son aquellas pequeñas cosas...
Un abrazo
Salut
Ahhh...eso también temo que sea cierto, JOSELU, ya con las calles asfaltadas, antes adoquinadas, se acabaron los limpia suelas.
También los limpiabotas como oficio. Las Adidas, las Nike, las Puma y demases, no son de cuero embetunado. Ya ves que los presentadores de TV salen todos con bambas de este tipo.
Yo soy de la vieja escuela, "chiruquero" para el campo y de zapato para la ciudad.
Salut
Cuando las calles no estaban adoquinadas era todo un sistema de desembarre muy eficaz. Hoy, casi piezas de museo.
ResponderEliminarUn saludo.
Ciertamente, CAYETANO, hay verdaderas maravillas.
ResponderEliminarGracias por estar
Salut
Aunque no queramos tiene mucho más que ver con el dia de hoy de lo que parece.
ResponderEliminarMuy interesante, Miguel. Siendo de barcelona, donde ya no vivo, nunca me había fijado en eso.
Salud y paciencia.
Anna Babra
Parece que son cosas de hace mucho tiempo,pero no, viví en los ochenta en la calle Hedilla(Horta), en tierra mucho tiempo.En hivierno,con las lluvías era un problema el barro.Teníamos a la entrada algo parecido a lo que has puesto para los pobres,aunque la zona no lo era.Luego pusieron acera,fue un alivio y más tarde la calzada.
ResponderEliminarSaludos
Porque casi todos son de interiores, ANNA BARBRA, y si no hay en tu portal es más que significativo que no te percates de ellos. Lo que pasa es que soy un fan de estos detalles que nos van desapareciendo, tengo casi elaborado un catálogo, como lo tengo de relojes de Sol de Barcelona, de picaportes, y de tapas de alcantarilla, que hay muchas diferentes, históricas e increiblemente variadas.
ResponderEliminarDetalles que tiene la ciudad.
Un abrazo
Precisamente, tengo otro de la calle Feliu i Codinas, CAR RES, también exterior, y de finca de pocos "posibles", a pie de calle y donde supongo, los de la finca y los que no lo eran, se limpiaban los zapatos. Aquello hace cincuenta años era un barrizal ¡¡
Afortunadamente todo ha cambiado en aquel barrio, soy un fan de la calle Campoamor y Salses ¡
Salut
Me gusta esa pared naranja con líneas verdes, me parece muy original.
ResponderEliminarUn saludo
Pues son unas baldosas de cerámica muy raras, y que valen un pastón, DANIEL.
ResponderEliminarSon limpias, duraderas, brillantes y escupen el polvo.
Además el colo es maravilloso
Un abrazo