Les pido mil perdones, pero La Vanguardia (26/04/24) no me ha dejado insertarlo, o mis escasos conocimientos informáticos, seamos sinceros, han impedido que lo hiciera con la corrección que se merece.
El artículo es harto interesante y por eso me he atrevido a copiar y pegar.
Tenemos, en resumidas cuentas, más generales que soldados, y esto no es sostenible.
Un problema llamado Generalitat
12-M INFORMES: LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA
Los síntomas de deterioro del servicio público son evidentes en Catalunya. Por muy buenas que sean las decisiones políticas, su aplicación es cada vez más ineficiente. Estos problemas repercuten en toda la sociedad y en la actividad económica del país.
informe administración 12-M
450 altos cargos y 282.000 trabajadores públicosSi sigue el ejemplo de sus predecesores, una de sus primeras tareas será designar a unos 450 altos cargos. Otras administraciones han empezado a limitar los nombramientos políticos y han apostado por una cierta profesionalización de la dirección pública. Catalunya todavía no.
La paradoja es que estas 450 personas deciden sobre el trabajo de 282.000 empleados (datos del presupuesto del 2023) al servicio de la Generalitat y su extensa galaxia de 208 organismos públicos o participados. Estos trabajadores, cada vez que cambia el gobierno, miran hacia el despacho de arriba y se preguntan quién vendrá a ocuparlo, aunque ellos, la mayoría, seguirán ahí pase lo que pase. Esa es la naturaleza de la Administración: permanece, aunque la democracia cambie el rumbo político.
De estos 282.000 empleados, unos 183.000 son funcionarios, otros casi 100.000 ocupan otras categorías, incluidas las sustituciones. El 80% presta servicio en las áreas de Educación, Sanidad, Interior y Justicia.Pueden parecer cifras descomunales, pero como señala Ismael Peña-López, el hoy director de la Escola d’Administració Pública de Catalunya, “está lejos de la media de los países con los que podemos compararnos para atender las necesidades que demandan sus ciudadanos. Otra cosa es que esta estructura funcione bien, y está claro que tenemos problemas”.
En el 2021, con el sello de la Unión Europea, se publicó el Índice de Calidad del Gobierno, la cuarta entrega de este indicador desde el 2010, y la Generalitat, que ya iba rezagada, quedó en la cola de las comunidades autónomas españolas y de la mayoría de las regiones europeas homologables.
El politólogo Antoni Biarnes, es el coordinador del Fòrum d’Entitats per la Reforma de l’Administració (FERA). En su comité esta Cecot, la Cambra, Esade, Iese, el Col·legi d’ Economistes o el Tercer Sector. Los sucesivos informes del Fòrum son concluyentes: la Administración catalana funciona mal. “Hay demasiada burocracia, no se alcanzan los objetivos; al revés, se entorpecen y nadie evalúa qué se está haciendo. Hoy un buen funcionario tiene los mismos incentivos que un mal funcionario. No hay dirección”.
Ahí están los síntomas: los demoledores informes PISA, las listas de espera en la sanidad, la revuelta de los agricultores contra la burocracia, la ineficaz gestión de las inversiones, de las ayudas sociales y a las empresas... “Las decisiones políticas pueden ser buenas, pero su aplicación no lo es”, resume Biarnes.
La Escola d’Administració Pública que dirige Peña-López tiene 111 años. La fundó Prat de la Riba, el presidente de la Mancomunitat, anticipándose a lo que más tarde harían otros países: formar al servidor público.
De ahí “el optimismo antropológico” con el que Catalunya, en la descripción de Carles Ramió, catedrático de Ciencia Política y Administración de la Universitat Pompeu Fabra, empezó a reconstruir la Generalitat en los años setenta. “Al principio, Catalunya y el País Vasco fuimos el modelo. Pero a medida que pasaron los años y la Administración fue creciendo, los políticos perdieron interés o capacidad para enderezar lo que no funcionaba”.
Ya en los últimos años de los gobiernos de Pujol se hicieron los primeros intentos de corregir algunos síntomas de corrosión. Luego, con el tripartito se elaboró un libro blanco y se limitó el número de altos cargos. Con Artur Mas se hicieron como mínimo dos informes, en parte, forzados por la política de recortes. Pero nadie se atrevió a dar el gran paso. El procés no hizo más que postergar la solución.
“Pero ya no hay más tiempo –subraya Peña-Lopez–, en diez años un tercio de estos servidores públicos se van a jubilar. ¿Volveremos a ocupar las mismas plazas vacantes? ¿No deberíamos preguntarnos antes si en lugar de un administrativo no necesitamos un experto en IA cuya plaza hoy no existe? Y para eso hace falta alguien que tenga un mapa de la administración y pueda responder a la pregunta ¿qué necesitamos para hacer bien lo que se nos pide?”.
“Necesitamos –señala Ramió– una dirección pública profesional a la que se acceda con un sistema meritocrático, de acuerdo con las competencias y la trayectoria del trabajador”. Y no hay excusas. “Con la legislación del Estado se puede hacer. Solo hace falta adaptar la de la propia Generalitat. Aún sigue anclada en el siglo pasado”.
Més o menys, la Generalitat és com les altres administracions, s'ha de col·locar a molta gent anada a menys, i a més, aquí tenim el problema de què hi ha més partits que a Madrid.
ResponderEliminarSalut.
Massa gent poc productiva, aquest és uns dels problemes de tindre tants partits, això genera molts gastos i pocs profits.
EliminarSalut
Guaita que he trobat: https://es.statista.com/grafico/20648/proporcion-de-asalariados-en-el-sector-publico-en-espana/
Eliminarhttps://es.ara.cat/economia/cataluna-se-mantiene-como-la-comunidad-autonoma-con-menos-trabajadores-publicos-leandre-ibar_1_2644619.html
EliminarEl sistema se inspira en la hermosa imagen heredada de tiempos pasados, pero que se actualiza en el presente: La imagen de dos operarios municipales arreglando un socavón en un lado de la calle. Se pueden ver a los dos operarios, rodeados de media docena de jubilados que solícitos, colaboran ofreciendo una opinión cada uno y por si no fuera suficiente, les gorrean un cigarrillo y un trago de la bota de vino.
ResponderEliminarEn el caso que nos ocupa, tenemos ministerios, consellerias y luego un montón de asesores que hacen las veces de los jubilados, gorreando todo lo que pueden. Patria!!
jajajaja...siii y los jubilatas son los "asesors i consellers" de l´actualitat... jajaja
Eliminarsalut
No Ricard esa imagen ""La imagen de dos operarios municipales arreglando un socavón en un lado de la calle"" y los jubilados...... .
EliminarLos jubilados ya rindieron lo suyo, haber si entre bomberos nos vamos a pisar la manguera.
Esa imagen suelen ser de otros funcionarios públicos que miran y no trabajan.
He estado en algunas reuniones con el tema del camión eléctrico, La conclusión es que los políticos viven del ideario e ignoran como desarrollar las cosas en la práctica, simplemente porque son ignorantes que nunca han trabajado en nada de provecho.
ResponderEliminarEl tema eléctrico en el sector del transporte es un síntoma de eso, resulta que hasta hace unos días los camiones eléctricos estaban fuertemente subvencionados (yo soy enemigo de las subvenciones, que conste) pero resulta que en España no hay una infraestructura de cargadores en áreas de servicio, ¿por que no las hay? pues porque intervienen muchas administraciones y todas con diferentes intereses. Potencia en la red hay de sobra, pero falta lo que se denomina el "último km" es decir en punto de recarga donde canalizar esa potencia y ahi los intereses se cruzan, el de urbanismo quiere una cosa, el de Industria otra, el de Carreteras aquella, el Ayuntamiento que tiene terrenos al lado mira sus intereses y el resultado final es que nadie hace nada pero seguimos dando subvenciones que es aumentar el gasto sin hacer inversión. Inversión es poner cargadores o infraestructura para que se pongan, eso requiere mucho trabajo y dedicación, dar una subvención lo hace el más tonto (y tonta) de mi pueblo. Por eso el gasto crece y la inversión disminuye.
Otra medida es que se pueda cambiar personal entre las diferentes administraciones, por ejemplo, ante cargas de trabajo de alguna administración se pudieran transferir trabajadores de otras menos cargadas, asi unos no estarían sobre cargados y otros mirando que es lo que ocurre en muchas administraciones.
En Burgos, por ejemplo, cuando nieva si tu vas a Santander por el puerto del Escudo veras que primero sale el quitanieves del Estado y hace "sus" carreteras , por donde ha pasado el quitanieves del Estado para el quitanieves de la Junta y hace sus carreteras, después donde ha pasado el quitanieves del Estado y el de la Junta pasa el de la Diputación ya hace las suyas.
A las once y media de la mañana, más o menos, veras a los tres equipos en Cilleruelo de Bezana almorzando aunque el tramo de entrada al Escudo este tapado porque como no es de su competencia pues no lo hacen, asi funciona este puto país. Cuando ese trabajo se pudiera hacer con 33% de equipo humano y material menos y dar mejor servicio al ciudadano.
Nos vamos a arruinar por gilipollas.
Un saludo.
Todo lo anteriormente descrito eliminaría mucho cargo político puesto a dedo y ahí viene el problema ¿que hay de lo mio?.
EliminarUn saludo.
Veo que no hay diferencias entre administraciones, y que los perjudicados, ya ves, son los administrados, sean estos de Burgos o de Barcelona. Una administración sobrecargada, no lo digo yo, que no se nada, sino desde dentro de la misma Generalitat, que es como un elefante, lenta y burócrata, llena de favores y favoritismos, poco productiva y políticamente copada.
EliminarNo sé que hay de lo tuyo, lo veremos cuando entren los de los otros.
Un abrazo
He venido al dulce reclamo de tu blog, gran Tot, y no es un tema baladí. Hace unos siglos, ni más ni menos, era un asunto que preocupaba a los llamados arbitristas, generalmente denostados. Incluso la acerada pluma de Quevedo en su fabuloso Buscón, vaya libro que se sacudió el joven genio, en la veintena. Pues el autor español, les hacía una semblanza descarnada en unos de sus pasajes, dado que su personaje se encontraba con uno de ellos. Entonces, preocupaba al reino la toma de Ostende, rodeada de agua de mar y de ríos, que dificultaban su toma. El arbitrista de Quevedo sugería a cambio del arbitrio o recompensa por arbitrar, que se secase una de las partes de la ciudad con una esponja gigante...... Es uno de los pasajes que más me divierte.
ResponderEliminarLo traigo a colación, porque algunos de esos arbitrios en períodos de desempleo, que también lo había en la época, y preeminentemente en el sector agrícola, arrojaron soluciones que no distan mucho de las actuales, que los monarcas afortunadamente no tomaron en consideración. La primera, que las explotaciones se repartieran los excedentes de trabajadores desempleados. Y la siguiente, que la administración empleara todos esos recursos ociosos. A cambio de un sueldo, dinamizarían la economía, otra cosa es las tareas que se les pudieran asignar ( ya había algunos keynesianistas, que se le adelantaron más de tres siglos). Claro, que el estado tenía unas finanzas frágiles, no era la primera vez que por falta de numerario se habían incautado de la plata y oro de las Américas, costumbre inveterada de los Austrias, iniciada por Carlos I, o que les asolaran ni más ni menos que siete bancarrotas, por los excesivos gastos derivados de las guerras de la Contrarreforma y otras no menos ruinosas para nuestras arcas.
Con esto, lo que quiero decir, es que si analizamos la evolución de los datos de empleo público, sorprende su aportación a la serie y explica parte de las buenas cifras excepto en la última encuesta. No en vano, hemos superado en las CCAA el umbral de los 100 mil millones (en el conjunto de todas las administraciones la cifra asciende a 179 mil millones, 21 mil millones superiores si comparamos el %PIB destinado a otros países de la UE). Para las CCAA supone más de un 40% de su presupuesto, y es buen momento, primero para preguntarse si lo podemos pagar. No es solamente la administración, sino la infinidad de organizaciones, algunas llamadas no gubernamentales, que orbitan en torno al presupuesto público. En una entrevista, leí, no recuerdo el experto de AAPP, que decía que algunos organismos se han vaciado de competencias, que las han trasladado a esas organizaciones. Tienen personal, pero trasladan parte del papeleo e información a las organizaciones. Más disfunciones, y más que en el incremento de recursos, habría que realizar una evaluación de si nos lo podemos permitir, como primera premisa. Apelando a deuda, y subidas impositivas, la respuesta parece clara, Tot. Aunque uno escucha a sindicatos, hablar de ratios de creación de empleo público, sin atenerse a ningún tipo de necesidad, o a partidos que actualmente forman parte del gobierno, y no les resto ni un ápice de responsabilidad a las comunidades autónomas. Seguramente son necesarios en algunas áreas, faltan y no se cubren las bajas o no se produce la reposición necesaria. En otras, me azoran las dudas, querido Tot.
Y aquí volvería a mis arbitristas. Que ya en el siglo XVII se preguntaban por la eficiencia de la administración y el exceso de regulación/ normas que sacaban de productores de la economía productiva a dirimir pleitos. Qué dirían de nuestros tiempos de exceso sobrerregulatorio. Una reforma de la administración debería ir acompañada de un control de la pulsión de sobrerregular del actual gobierno y de la UE. Lo hemos visto en el sector agrícola. Digitalizar pequeñas explotaciones para generar datos, que leerán o no, ésa es otra, los nuevos funcionarios de la nueva agencia, o si no, de un área nueva de una agencia ya creada. Yo lo puedo acreditar en el sector financiero y aledaños, en los que el llamado reporting ha crecido hasta cifras fabulosas e incontrolables. En caso de duda, reporta, se suele decir. Porque hay un bosque de normativa, MIFID, EMIR, y ahora lo vuelvo a retocar, ya que caigo en la falacia que la realidad se puede controlar y caer en todos los tipos desde la regulación. Hay una crisis, una vez más creo agencias, cambio la regulación, con todos los efectos distorsionadores que acarrea. Más empleados, más normas, que se superponen y que pueden entrar en contradicción. La sobrerregulación puede ser igual de perniciosa que la no regulación. El paradigma el campo. De qué les vale el diario de la vaca, medir las emisiones que se han producido al excavar una zanja. Sinceramente, se queman recursos de todos, hasta de particulares con tanta burocracia. Y exige más empleados. Por eso, gran Tot, qué razón tenían algunos arbitristas. Aunque muchos les crean personajes más propios de una chirigota, como Quevedo, para mí supieron intuir los males que aquejaban a su tiempo, y visto la evolución, al nuestro. Perdón, Tot, por mis catilinarias......largas como una monserga dominical. Tengo más tiempo, y se nota. Cuídate, eres un crack, pero te impide verlo tu modestia.
ResponderEliminarNo pidas perdón SERGIO, acaso tendría que hacerlo yo por carecer de los datos que nos aportas. Datos que la gran mayoría, ojo, no digo todos, pero sí la gran mayoría de IDEOLOGIZADOS obvian, porque todo aquello que moleste a su ideología, ya ves que omito la palabra idea, insisto, todo aquello que les distorsiona, es a todas luces fascista y pertenece a los blogs de la fachosfera, palabro muy de moda últimamente.
EliminarEn mi parco entender, cuando observo como NO se optimizan los recursos, escasos, por otra parte, y a devolver en su mayoría, aunque quien los administre intente decirme que es de los "míos", me pongo de mala leche.
Agradezco profundamente tus datos, abren los ojos y cierran la boca.
Temo por la deuda y mis nietos. 40.000 millones de euros a pagar de rédito por ella, y de forma anual, hacen que este país se vaya lentamente al carajo.
Gracias por tu compañía y por tus palabras
Miquel
Eso es lo que pido, Tot, que vayamos al meollo de las cifras y eso es en lo que tú haces hincapié, independientemente de cuál sean tus ideas. Un presupuesto desequilibrado nos conduce a todos, independientemente de cual sean nuestras ideas, fe que profesemos u orientación sexual, a un futuro de ajustes abruptos que nadie desea. Un saludo.
EliminarLa Generalitat es el ejemplo de ineficacia institucionalizada. No funciona. Todo es burocracia, gasto desmesurado, ineptitud en la gestión, administración inútil y monumental, propaganda política, charlatanería y poco trabajo útil. Todo esto crea una inseguridad jurídica que afecta a la economía productiva. No puede ser, no es tolerable, que para la construcción de un edificio industrial y su posterior inicio de la actividad se tengan que solicitar 126 licencias y permisos (obras, actividades, medio ambiente, seguridad y salud, justificación de residuos, etc. etc.) y esto ocurre en una comarca limítrofe con Barcelona. Cosas como esta demuestran la desgracia que tenemos que soportar.
ResponderEliminarAdemás hay una estructura ideológica y política que prima lo identitario sobre lo real. Las escuelas son centros de manipulación ideológica, y luego los resultados son los que son, veamos sino el informe PISA, estamos en la cola. La sanidad, la seguridad, el sector productivo, el tercer sector, todo está por los suelos.
Ha creado un monstruo terrible que se fagocita a sí mismo y nos fagocita a los demás con un sistema de impuestos que supera con creces lo que tributan los demás ciudadanos españoles.
Salud.
No hay nada que les haga entrar en razón, Francesc Cornadó. Es la misma administración la que da los datos, la que se ve a sí misma incompetente y burocratizada. Siempre ha sido gobernada por los mismos, así que no se puede decir que la derecha española haya hecho nada al respecto, siempre ha sido la derecha catalana, CiU y las rémoras que le asisten.
EliminarTodo me lleva a pensar que es una puerta giratoria con visos de querer hacer algo por la ciudadanía.
El hecho que nos citas de tener que tener 126 licencias para una obra nos puede hacer pensar que el precio de los pisos no sólo se encarece por el precio del solar, sino que hay "otras" dádivas que componer para que aquello que se proyecta se haga realidad.
Un abrazo y gracias por tu información
Salut
Tengo la
ResponderEliminarimpresión,
que la
burocracia,
está
generalizada,
en mi tierra,
para cualquier
chorrada, firme
usted aquí, el
típico"vuelva la
semana que
viene", o
"no no, tiene
que esperar a
mes y medio"
aunque supongo
que el volumen,
dependerá de
la región que
sea .
Si, esa es una impresión ya instaurada, Orlando. Pienso que no se salva ninguna administración. El retiro soñado de muchos políticos. Un rincón donde no ser molestado y cobrar decentemente.
EliminarUn abrazo
Salut
Muy buena la ilustración para expresar la propuesta de mucho general para tan pocos soldados. Me asombra la creatividad de la IA en cuanto a la capacidad de ilustrar prompts. Por lo demás, estoy de acuerdo con las ideas que proyectas en tus respuestas a comentarios y que se traduce en una enorme ineficacia de la administración pública catalana cuyos rectores se consideran la Dinamarca del sur si es que el pérfido estado español les facilitara la independencia. La España de las autonomías es el mayor fracaso de la nueva configuración del estado. Daniel lo exponer muy claramente con el tema de las quitanieves. Nepotismo, ineficiencia e ineficacia, costes elevadísimos, exceso de funcionarios y personal de confianza, legislaciones kafkianas contradictorias que entorpecen la toma de decisiones. Ahora todo está parado para saber qué piensa o siente el supremo líder del estado, en su rabieta adolescente. Miles y miles de puestos de trabajo muy bien remunerados dependen de él y tiemblan ante la posibilidad de que dimita por amor como el rey inglés. ¡Qué bonito!
ResponderEliminarTodo un despropósito, mi buen Joselu.
EliminarSalut ¡
En España según nos muestra la estadística de Francesc Puigcarbó en 2019 habia 3.250.000 empleados públicos, ahora hay 3.593.000.
ResponderEliminarhttps://www.ine.es/jaxiT3/Datos.htm?t=4262#_tabs-mapa
En cinco años hemos aumentado en 343.000 empleados públicos, pero para Sanidad y Educación ehhhh asi hemos visto casi desaparecer las listas de espera y la mejora sustancial en la Educación en este país.
Un saludo.
Los datos son los datos, ahí están..
EliminarSalut ¡
Precisamente este aumento de empleados públicos han sido en Sanidad y enseñanza, al menos en Catalunya.
EliminarTotalmente de acuerdo con tus comentaristas. Tengo poco o nada que añadir. Por cierto, ¿cómo consigues esas imágenes de I.A.?
ResponderEliminarUn abrazo.
Puse
Eliminarhttps://copilot.microsoft.com/
Entonces en la barra le puse: quiero muchos generales del ejército y un sólo soldado.
Me contestó que no lo entendía, y lo volví a repetir y me puso tres imágenes similares en lo que es la respuesta.
Cogí esta que la desvié a imágenes, en el ordenador, y de ahí la copié.
Un abrazo
Es igual Miquel pero son afines al DOGMA y hablan catalán, si el medico es un matasanos es igual, si el ingeniero es un fontanero es igual, si el maestro es un semianalfabeto es igual, etc, etc, lo importantes es seguir fiel al dictado y el idioma.
ResponderEliminarEs que todo, Anónimo es confuso, y ahora se mezcla en amalgama una serie de conceptos en las hasta nosotros mismos ya dudamos. Hemos banalizado las palabras, manoseado las ideas para convertirlas en ideología, individualizado pensamientos y unificado a criterio único el conmigo o contra mi, y no hay adversario político, hay enemigo, y así, de esta manera, no prosperamos. es una guerra en la que perdemos los ciudadanos, porque ellos, al final, Anónimo, pactan, pactan y se tragan lo que se hayan de tragar con tal de mantener su olla caliente, sus 4.500 euros, su visa y el sillón del ay utamiento.
EliminarEstamos jodidos.
salut