Había una vez un reloj de Sol mirando hacia el sur este en El Prat del Llobregat. Daba servicio en una masía, cerca del aeropuerto. Allí vivía, siempre a las órdenes de su maestro relojero, el Sol. De él dependía, de él y del amo de la casa donde prestaba sus servicios. La latitud era perfecta y su posición respecto al eje terráqueo gozaba de precisión, sin embargo y por circunstancias que se desconocen, poco a poco fueron prescindiendo de sus servicios, de tal forma que cuando se cayó la varilla que señalaba las horas del día no se reparó. Con el tiempo se fue deteriorando la pintura, y con ella los números, la forma, el color e incluso el significado de lo que una vez hubo y no hubiera tenido que dejar de ser.
PD: Se encontraba entre los dos marcos de los ventanales
Hi havia una vagada un rellotge de Sol mirant cap al sud est al Prat del Llobregat. Donava servei en una masia, a prop de l'aeroport. Allà vivia, sempre a les ordres del seu mestre rellotger, el Sol. D'ell depenia, d'ell i de l'amo de la casa on prestava els seus serveis. La latitud era perfecta i la seva posició respecte a l'eix de la terra gaudia de precisió, però i per circumstàncies que es desconeixen, a poc a poc van anar prescindent dels seus serveis, de tal manera que quan es va caure la vareta que assenyalava les hores del dia no es va reparar. Amb el temps es va anar deteriorant la pintura, i amb ella els númers, la forma, el color i fins i tot el significat del que un cop hi va haver i no hagués hagut de deixar de ser.
PD: Es trobava entre els dos marcs dels finestrals
I el rellotge com les il·lusions es va esvanir en el temps. Tempus fugit, rellotge de sol que desapareix.
ResponderEliminarSalut.
I pel que sembla, pràcticament ni rastre.
ResponderEliminarpodi-.
I que ja no tornará..
ResponderEliminarSalut FRANCESC PUIGCARBÓ.
Estaba, CARLOS PORTILLO -PODI-, entre los dos ventanales, aún quedan huellas e inclusive un pequeño rastro apenas perceptible de la varilla.
Pero nada, ya no queda nada. Imposible trabajar en esas condiciones.
Un abrazo
Tal como lo cuentas parece más la vida de un ser humano que la de un reloj. ¿Será por eso que siempre establecemos similitudes entre los mecanismos que hemos inventado para medir el tiempo y nuestra propia existencia?
ResponderEliminarEl aspecto de la masía no es bueno. El ayuntamiento parece que ha cortado las hierbas cercanas secas para prevenir incendios, yo hubiese hecho más, pasando el rastrillo. Una simple colilla ahí es el inicio del fuego, con estos calores. El paseo mañanero, a las once de vuelta. Prefiero el atardecer, me da más margen. Claro que el aire de la mañana es más rico en oxigeno, eso se sabía en los años del hambre y de falta de medicamentos, era la cura contra lo que se llamaba entonces "tosferina".
ResponderEliminarAyer(tarde-anochecer),me dejé caer hasta el Paseo de Gracia. Parecía la feria de Sevilla, por la cantidad de gente. Las terrazas de los bares llenas ¿Quedará alguien que no ha sido ya contagiado del Covid?
Saludos.
Ni el tiempo resiste al tiempo.
ResponderEliminarTodo es polvo en el viento.
Un abrazo.
Algunos mueren con dignidad; otros, no tanto. Y lo digo porque hace un tiempo, paseando vi un reloj por la zona de Riudarenas del cual ya no quedaba prácticamente nada, pero que un "artista grafitero" le había añadido en la parte mas baja la palabra "Casio" Y es que los hay con mala leche.
ResponderEliminar¿Será por eso?, FACKEL...
ResponderEliminarTe diré un secreto, los relojes, todos, son como los políticos, cada vez que los miras te dicen una cosa diferente...
Cuidate ¡¡
Prefiero la mañana, CAR RES. El suelo está húmedo y la calor no aprieta. La tarde es fuego, por muy rtarde que sea.
Ayer fui a TdC...me dio un mareo cuando subía la rampa, del hedor a meados...insoportable. Le pregunté a la hermana de la puerta que si no avisaban a los servicios de limpieza y me dijo que ya estaban avisados..era realmente insoportable.
El Covid ha venido para quedarse, así que precaución
Un abrazo
Absolutamente todo, RODERICUS
Salut
Pero tiene su miga, incluso parece una ironía, NOXEUS.
Gracias por estar
Cuidate que esto va para largo
Salut
Los relojes son más exactos que los políticos y que cada ciudadano vulgar y corriente.
ResponderEliminarNada que alegar, FACKEL.
ResponderEliminarSalut