És molt bonic. Suposo que el trampantojo és la simulació d una porta, un balcó, una finestra don no hi ha res, aquest, crec, no seria el cas. Una abraçada Salut
Muy bonito. Bueno; tenemos claro a qué tipo de porquerías se refería Cornado en su entrada. Y tiene mucha razón. Una excelente idea, la de los grandes murales, cuando se trata de "mejorar" las perspectivas urbanas afectadas por muros o paredes insulsas y vacías. Y no necesariamente solo, con imágenes realistas.
Es un mural precioso. No tiene nada que ver con los horrorosos grafitis que vemos pintarrajeados por ahí, ensuciándolo todo. En Barcelona y en muchas poblaciones del área metropolitana, debido a las diferencias de altura de los edificios colindantes, quedan al descubierto unas paredes medianeras cuyos paños de tabique pluvial de ladrillo van configurando un paisaje anodino y feo. Van muy bien las intervenciones de algún artista capaz de arreglar todo el desorden de alturas y medianeras con murales como ese que nos presentas. Es muy bonito. Es un mural, no es un tampantojo. El trampantojo, llamado también "trompe d’oeil" se vale de la falsa perspectiva, el artificio simulado y el ingenio disfrazado. A veces se sirve de la difusión de una luz oblicua sobre los objetos, la ausencia de horizonte, los fondos verticales o inexistentes y el abandono de profundidad espacial. A finales del iluminismo algún historiador de arte definió el trompe l’œil como un engaño tolerado. Vendría a ser algo así como una mentira piadosa. Con la postmodernidad, se ha dicho que el trampantojo es la anti-pintura. Para la crítica artística postmoderna el trampantojo -trompe l’œil- es una alucinación realista, es un estado artificioso de la mente.
Yo creo que el trompe d’œil es un elemento retórico que acompaña a la expresión artística. Encontramos trampantojos en casi toda la historia de la pintura. Yo recomiendo el trampantojo de Giulio Romano, la Caída de los gigantes (1525-1534) en el Palazzo Tè. de Mantua.
Gracias, Francesc, por aclararnos los términos. PD: He ido a ver en internet el trampantojo de Giulio Romano, una verdadera joya. Creo que vivimos una época en que todo lo que nos rodea es un trampantojo en sí mismo, una realidad virtual, que dicen los del diseño de las palabras. Gracias otra vez. Un abrazo
No soy yo muy de estos murales, porque desfiguran la belleza natural de pueblos y ciudades. Estoy pensando en los pueblos blancos de la serranía de Málaga, las calles judías de Córdoba, las blancas de la Mancha. Sin embargo ya veo por la tele,cómo algunos pintores convencen a los paisanos para pintar en sus fachadas,fotografiandose delante de las obras.Un desastre. En Sants hay un trampaantojo,que simula balcones,que no existen,bien diseñado.Hay otros en la parte vieja de Barcelona que sobran,se carga su naturalidad urbana. Saludos
Si, he visto el trampantojo de Sants, en la misma avenida, creo que sale en el anexo que le he puesto a Francesc Puigcarbó. En Barcelona los hay de diferentes estilos, ventanas, portales, balcones...siempre dando una perspectiva nueva a lo que es la fachada de la casa. Salut
Esto es una muestra de arte, no las gilipolleces que ve uno por ahí, que si declaraciónes de amor, que si Haridian, Vane y Jessi son las cremas , etc .
Imagino que los abyectos grafiteros que ensucian paredes y trenes se consideran 'artistas', pero no son sino unos nefastos y mediocres pintamonas. Cuando uno ve un mural o un grafiti de calidad, lo agradece. Este es el caso. Hay un pueblo en la provincia de Lérida llamado Panelles que es una maravilla grafitera. Dejo enlace Panelles pueblo grafitero Saludos.
No había escuchado nunca el nombre del pueblo, y me causa una impresión de primera. No hay nada en Google Maps, quizá porque esto es posterior y no está actualizado, pero me ha gustado mucho. Hay alguna foto fija, pero no en el callejero. Gracias Un abrazo salut
Observo que los propietarios que pintan con mimo las persianas de sus locales, suelen ser respetados por los grafiteros y los inmisericordes pintarrajeadores del spray; se ve que tienen su corazoncito.
Hay verdaderas de arte cubriendo esas medianeras a la vista —como comenta F.C.—, tan habituales en nuestras ciudades, provocadas las diferentes alturas de los edificios a causa del caos urbanístico tan común en España o por la escasa calidad de las edificaciones de muchos barrios. En este sentido, me gusta los que ofrece Rodericus de Santoña, murales figurativos hechos por buenos artistas aprovechando paredes ciegas. En Madrid hay muchos muy buenos, en Barcelona también, y veo en el Prat éste que señalas, muy elegante, con esa chica tan guapa que embellece el barrio de san Cosme, que buena falta le hacía. En Francia no hay tanto caos urbanístico como aquí, pero he visto también ejemplos estupendos, muchos en trompe-l'oeil, que en general son los que más me agradan, porque suelen enmascarar imperfecciones en el diseño de los muros.[Por no hablar los del jesuita Andrea Pozzo en Roma, que eso ya son palabras mayores...].
Otro asunto: Me gustan los silos para almacenar trigo o cebada, grano en general, que hay repartidos por muchos pueblos castellanos; una arquitectura sobria y potente al pie de los campos de cereales, que se vislumbra ya a la distancia. Y me preocupa esa iniciativa cada vez más extendida de pintarlos de colorines y organizar rutas turísticas para verlos. Me desagrada ver esos silos convertidos en exponentes del arte urbano, como si fueran el metro del Bronx, con toda esa estridencia cromática, colorido chillón, me parece algo fuera de lugar; esto último me lo comentaba en cierta ocasión Paco Castillo, el del blog "La metáfora del viento" y circunstancial comentarista aquí. Ahora que se acerca todo eso tan yanqui del Halloween, les obsequio con un ejemplo firmado por Nychos, un nombre de guerra muy adecuado a su arte, situado en Porzuna (Ciudad Real) y que no tiene vocación efímera. ¡Va por ustedes!
Ozzzzzzú..que yu-yu. Gran Uribe. Una cosa es un mural, otra un osario al aire libre, pero bueno, si gusta ya no hay nada que decir. No me gustan los faros estridentes, no les encuentro motivo, si las paredes medianeras, los lugares apartados, o aquellos donde el oscuro predomina por el ambiente o la localización. este de Sant Cosme está bien, porque el barrio lo necesita, y a legra la vista. No me hace gracia que los molinos de viento, blancos y encalados, se pinten de colores chillones, no es ese el leiv motiv ni tiene nada que ver con la obra primigenia, pero supongo que como todo, será cosa de gustos, del alcalde o del dueño del molino. Un abrazo con esos doscientos seis huesos articulados entre sí. Salut
Un mural preciós. Se li pot dir trampantojo, o no és correcte?
ResponderEliminarSalut.
És molt bonic.
EliminarSuposo que el trampantojo és la simulació d una porta, un balcó, una finestra don no hi ha res, aquest, crec, no seria el cas.
Una abraçada
Salut
Francesc, unes mostres:
Eliminarhttps://totbarcelona.blogspot.com/search?q=trampantojo
Muy bonito. Bueno; tenemos claro a qué tipo de porquerías se refería Cornado en su entrada. Y tiene mucha razón. Una excelente idea, la de los grandes murales, cuando se trata de "mejorar" las perspectivas urbanas afectadas por muros o paredes insulsas y vacías. Y no necesariamente solo, con imágenes realistas.
ResponderEliminarSí, es espléndido el dibujo y su realización, Ricard. Incluso alegra el lugar.
EliminarUn saludo.
Salut
Un buen mural. En mi pueblo, hay una zona que permiten el grafiti, los hay muy buenos.
ResponderEliminarSaludos
Creo que hay verdaderas obras de arte, Carlos.
EliminarUn abrazo
Es precioso. Un beso
ResponderEliminarUn abrazo
EliminarSalut
Es un mural precioso. No tiene nada que ver con los horrorosos grafitis que vemos pintarrajeados por ahí, ensuciándolo todo.
ResponderEliminarEn Barcelona y en muchas poblaciones del área metropolitana, debido a las diferencias de altura de los edificios colindantes, quedan al descubierto unas paredes medianeras cuyos paños de tabique pluvial de ladrillo van configurando un paisaje anodino y feo. Van muy bien las intervenciones de algún artista capaz de arreglar todo el desorden de alturas y medianeras con murales como ese que nos presentas. Es muy bonito. Es un mural, no es un tampantojo. El trampantojo, llamado también "trompe d’oeil" se vale de la falsa perspectiva, el artificio simulado y el ingenio disfrazado. A veces se sirve de la difusión de una luz oblicua sobre los objetos, la ausencia de horizonte, los fondos verticales o inexistentes y el abandono de profundidad espacial.
A finales del iluminismo algún historiador de arte definió el trompe l’œil como un engaño tolerado. Vendría a ser algo así como una mentira piadosa. Con la postmodernidad, se ha dicho que el trampantojo es la anti-pintura. Para la crítica artística postmoderna el trampantojo -trompe l’œil- es una alucinación realista, es un estado artificioso de la mente.
Yo creo que el trompe d’œil es un elemento retórico que acompaña a la expresión artística.
Encontramos trampantojos en casi toda la historia de la pintura. Yo recomiendo el trampantojo de Giulio Romano, la Caída de los gigantes (1525-1534) en el Palazzo Tè. de Mantua.
Un fuerte abrazo.
Gracias, Francesc, por aclararnos los términos.
EliminarPD: He ido a ver en internet el trampantojo de Giulio Romano, una verdadera joya.
Creo que vivimos una época en que todo lo que nos rodea es un trampantojo en sí mismo, una realidad virtual, que dicen los del diseño de las palabras.
Gracias otra vez.
Un abrazo
No soy yo muy de estos murales, porque desfiguran la belleza natural de pueblos y ciudades. Estoy pensando en los pueblos blancos de la serranía de Málaga, las calles judías de Córdoba, las blancas de la Mancha. Sin embargo ya veo por la tele,cómo algunos pintores convencen a los paisanos para pintar en sus fachadas,fotografiandose delante de las obras.Un desastre.
ResponderEliminarEn Sants hay un trampaantojo,que simula balcones,que no existen,bien diseñado.Hay otros en la parte vieja de Barcelona que sobran,se carga su naturalidad urbana.
Saludos
Si, he visto el trampantojo de Sants, en la misma avenida, creo que sale en el anexo que le he puesto a Francesc Puigcarbó. En Barcelona los hay de diferentes estilos, ventanas, portales, balcones...siempre dando una perspectiva nueva a lo que es la fachada de la casa.
EliminarSalut
Una maravilla que rompe la monotonía de los muros vacíos.
ResponderEliminarEn Santoña hay un conjunto majestuoso de tres murales en bloques de viviendas colindantes, dedicado al mundo marinero y pescador.
Te dejo un enlace .
https://www.fotopaises.com/foto/santona-espana-134046
Saludos.
Ostras, ¡que guapo!.
EliminarMe gusta cantidad
Gracias Rodericus.
Salut
Esto es una
ResponderEliminarmuestra de
arte, no las
gilipolleces
que ve uno
por ahí, que
si declaraciónes
de amor, que si
Haridian, Vane
y Jessi son las
cremas , etc .
jejeje...Sí, esto es agradable de ver, Orlando, se agradece incluso.
EliminarSalut
Imagino que los abyectos grafiteros que ensucian paredes y trenes se consideran 'artistas', pero no son sino unos nefastos y mediocres pintamonas. Cuando uno ve un mural o un grafiti de calidad, lo agradece. Este es el caso. Hay un pueblo en la provincia de Lérida llamado Panelles que es una maravilla grafitera. Dejo enlace Panelles pueblo grafitero Saludos.
ResponderEliminarEl pueblo es Penelles no como había escrito.
ResponderEliminarNo había escuchado nunca el nombre del pueblo, y me causa una impresión de primera.
EliminarNo hay nada en Google Maps, quizá porque esto es posterior y no está actualizado, pero me ha gustado mucho. Hay alguna foto fija, pero no en el callejero.
Gracias
Un abrazo
salut
Observo que los propietarios que pintan con mimo las persianas de sus locales, suelen ser respetados por los grafiteros y los inmisericordes pintarrajeadores del spray; se ve que tienen su corazoncito.
ResponderEliminarHay verdaderas de arte cubriendo esas medianeras a la vista —como comenta F.C.—, tan habituales en nuestras ciudades, provocadas las diferentes alturas de los edificios a causa del caos urbanístico tan común en España o por la escasa calidad de las edificaciones de muchos barrios. En este sentido, me gusta los que ofrece Rodericus de Santoña, murales figurativos hechos por buenos artistas aprovechando paredes ciegas. En Madrid hay muchos muy buenos, en Barcelona también, y veo en el Prat éste que señalas, muy elegante, con esa chica tan guapa que embellece el barrio de san Cosme, que buena falta le hacía. En Francia no hay tanto caos urbanístico como aquí, pero he visto también ejemplos estupendos, muchos en trompe-l'oeil, que en general son los que más me agradan, porque suelen enmascarar imperfecciones en el diseño de los muros.[Por no hablar los del jesuita Andrea Pozzo en Roma, que eso ya son palabras mayores...].
Otro asunto: Me gustan los silos para almacenar trigo o cebada, grano en general, que hay repartidos por muchos pueblos castellanos; una arquitectura sobria y potente al pie de los campos de cereales, que se vislumbra ya a la distancia. Y me preocupa esa iniciativa cada vez más extendida de pintarlos de colorines y organizar rutas turísticas para verlos. Me desagrada ver esos silos convertidos en exponentes del arte urbano, como si fueran el metro del Bronx, con toda esa estridencia cromática, colorido chillón, me parece algo fuera de lugar; esto último me lo comentaba en cierta ocasión Paco Castillo, el del blog "La metáfora del viento" y circunstancial comentarista aquí. Ahora que se acerca todo eso tan yanqui del Halloween, les obsequio con un ejemplo firmado por Nychos, un nombre de guerra muy adecuado a su arte, situado en Porzuna (Ciudad Real) y que no tiene vocación efímera. ¡Va por ustedes!
https://hospederiasantaelena.com/wp-content/uploads/Silo-porzuna.jpg
[Ojo al dato: ya han empezdo con los faros y lo siguiente serán los molinos de viento manchegos].Un saludo.
Ozzzzzzú..que yu-yu. Gran Uribe.
EliminarUna cosa es un mural, otra un osario al aire libre, pero bueno, si gusta ya no hay nada que decir.
No me gustan los faros estridentes, no les encuentro motivo, si las paredes medianeras, los lugares apartados, o aquellos donde el oscuro predomina por el ambiente o la localización.
este de Sant Cosme está bien, porque el barrio lo necesita, y a legra la vista.
No me hace gracia que los molinos de viento, blancos y encalados, se pinten de colores chillones, no es ese el leiv motiv ni tiene nada que ver con la obra primigenia, pero supongo que como todo, será cosa de gustos, del alcalde o del dueño del molino.
Un abrazo con esos doscientos seis huesos articulados entre sí.
Salut
Bien puesta la definición, unos son basura, otros arte.. además, logran convertir edficios horribles en una bonita foto, ¿verdad?
ResponderEliminarUn abrazo, Beauséant
EliminarGracias por estar