Em sembla que aquest edifici té els dies comptats amb la propera remodelació, ja aprovada, d'aquest tram del carrer Entença. O sigui que, col·leccionistes, espavileu.
Hace muchos años estuve vendiendo maquinaria agrícola por media España, no había teléfonos públicos en los pueblos y estos se encontraban en viviendas de ciudadanos a donde tenías que acudir para poder realizar una llamada. Se vivía mejor sin estar "tan comunicado"... Un saludo
Cierto, TARARI QUETEVI, no hay nada más bonito que este tipo de material para los carteles. No los fastidiaba la luz solar ni el agua, y siempre se mantenían impolutos. este al menos tiene 60 años, y está como nuevo. Un abrazo
El latín nos hermana, PITT TRISTÁN Salut
Después, DANIEL, las centralitas, que también estaban en domicilios particulares. Después las cabinas. Mas tarde, el fijo de casa. Hoy el de bolsillo. Mañana seguro que lo haremos telepaticamente. Cada tiempo tuvo lo suyo. No les quites a los jóvenes y menos jóvenes el celular, que matarías a media humanidad de tristeza. Un abrazote
A mí siempre me parecieron pasados de moda y los relacionaba, cuando era yo pequeño allá por los 70', con pueblos a los cuales aún no había llegado la modernidad que a mí me parecía tan cotidiana.
Un pequeño detalle que nos resulta muy significativo. Es una placa que me es muy conocida pues he visto otras iguales en otros diversos sitios. Restos de un país y de otros tiempos que se ha quedado colgado. Un abrazo, Miquel.
Es digno de ser guardado como una antiguedad, sería bueno tener una escalera a mano y apropiarselo.
ResponderEliminarMuy bonito.
Saludos Miquel.
Em sembla que aquest edifici té els dies comptats amb la propera remodelació, ja aprovada, d'aquest tram del carrer Entença. O sigui que, col·leccionistes, espavileu.
ResponderEliminarLa pots arrencar i endur-te-la a casa, em sembla que ningú reclamará.
ResponderEliminarSalut
Es un cartel que me gusta cantidad, MTRINIDAD, y lo veo ahí, medio abandonado...
ResponderEliminarUn abrazo y bon día¡¡¡
Això, això, com diu ANÓNIMO ¡col·leccionistes, ¡espavileu¡
Salut
jejeje no em fio de telefónica, FRANCESC PUIGCARBÓ...son lladres profesionals
Una abraçada
Entonces esos carteles eran sumamente necesarios. Los tiempos cambian.
ResponderEliminarUn saludo.
Sin duda, CAYETANO, en más de una ocasión los buscaba.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias por estar
Esa placa debe desaparecer: está en español.
ResponderEliminarSalut.
Hace muchos años estuve vendiendo maquinaria agrícola por media España, no había teléfonos públicos en los pueblos y estos se encontraban en viviendas de ciudadanos a donde tenías que acudir para poder realizar una llamada. Se vivía mejor sin estar "tan comunicado"...
ResponderEliminarUn saludo
Cierto, TARARI QUETEVI, no hay nada más bonito que este tipo de material para los carteles. No los fastidiaba la luz solar ni el agua, y siempre se mantenían impolutos. este al menos tiene 60 años, y está como nuevo.
ResponderEliminarUn abrazo
El latín nos hermana, PITT TRISTÁN
Salut
Después, DANIEL, las centralitas, que también estaban en domicilios particulares. Después las cabinas. Mas tarde, el fijo de casa. Hoy el de bolsillo.
Mañana seguro que lo haremos telepaticamente.
Cada tiempo tuvo lo suyo. No les quites a los jóvenes y menos jóvenes el celular, que matarías a media humanidad de tristeza.
Un abrazote
A mí siempre me parecieron pasados de moda y los relacionaba, cuando era yo pequeño allá por los 70', con pueblos a los cuales aún no había llegado la modernidad que a mí me parecía tan cotidiana.
ResponderEliminarpodi-.
Posiblemente tengas razón, CARLOS PORTILLO PODI, dan esa sensación.
ResponderEliminarUn abrazo
Un pequeño detalle que nos resulta muy significativo. Es una placa que me es muy conocida pues he visto otras iguales en otros diversos sitios. Restos de un país y de otros tiempos que se ha quedado colgado. Un abrazo, Miquel.
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