Vivir al lado de la vía del tren y trabajar para los ferrocarriles era toda una vocación.
Aún quedan casas en Sant Andreu con la impronta.
Esta es una de las viviendas para oficiales, supongo que de mantenimiento. No puedo intuir nada más.
Calle del Pont. Sant Andreu.
Viure al costat de la via del tren i treballar per als ferrocarrils era tota una vocació.
Encara queden cases en Sant Andreu amb l'empremta.
Aquesta és una dels habitatges per a oficials, suposo que de manteniment. No puc intuir res més.
Carré del Pont. Sant Andreu.
Viure on treballes és el molts feien abans, com per exemple les botigues i colmados que tenien vivienda a l'interior.
ResponderEliminarOn vivien els dels colmados o botigues de comestibles que s'en deien, era a la rerebotiga, era com les dels paquis d'ara, estaven sempre obertes o com a molt amb la persiana mig abaixada, però eren a cal mai tanquis.
ResponderEliminarsalut
Y seguro que no dormían.
ResponderEliminarY es que Miquel, lo ves todo no se te escapa nada.
Bon dia i una abraçada forta.
Has visto las argollas en el post de CHORDI?
http://madbar2.blogspot.com.es/2016/03/la-maquina-de-monteagudo.html
ResponderEliminarNo recuerdo exactamente donde están estas casas. Podria ser detrás de la Iglesia de Sant Andreu?. Es que hay otras, aunque aquellas puede ser que pertenezcan a la Sagrera, entre Plaza Orfila y Puente del Trabajo. Son iguales.
ResponderEliminarEsta frase de Francesc me ha hecho gracia porque era muy buena y ya no la recodaba:" cal mai tanquis"
Salut.
M'encanten aquestes relíquies, Miquel!
ResponderEliminarEra toda una tradición en las compañías de ferrocarriles tener una vivienda de la empresa, hasta no hace mucho algunas estaciones disponían de viviendas para trabajadores en la segunda planta del edificio.
ResponderEliminarLa única pega era que estabas a disposición de la compañía las veinticuatro horas del dia, y que si había una avería a las tres de la mañana, no podías escaquearte.
Saludos.
Cert, EL PELETERO
ResponderEliminarSalut
jejejeje...gran veritat, FRANCESC PUIGCARBó
una abraçada
No, no las he visto, me pongo ahora, MTRINIDAD...Voy a por ellas
Un abrazo
Son la de detrás de la iglesia, JOSEP.
Un abrazo
te me cuidas
Salut
I a mí, ENRIC...m´encanta Barcelona, está plena de coses d´aquestes.
salut
Si, las 24 horas, como ahora los que trabajan por internette...no te escapas RODERICUS
te me cuidas.
salut
Muchas compañías estatales construían unas viviendas para sus empleados. Ocurría con la Renfe, con Correos, con los empleados de prisiones, con las centrales hidroeléctricas, en la vivienda del portero en muchas fincas urbanas y en la misma universidad donde en el mismo edificio existía la vivienda del bedel o en el caso del Banco Central de la plaza Cataluña. Siempre el cobijo estaba vinculado a la relación laboral, una forma de paternalismo empresarial que hemos rechazado pero que ahora se ha sustituido por unas relaciones laborales peores.
ResponderEliminarSalud
Cornadó
Ciertamente FRANCESC CORNADó
ResponderEliminarGracias por pasarte.
Salut
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ResponderEliminarY casas para los peones camineros, al menos a mediados del lejano siglo pasado.
ResponderEliminarHola Miquel,
ResponderEliminarla Vanguardia ho explica breument: http://www.lavanguardia.com/local/barcelona/20150924/54435439726/barcelona-secreta-militar-casa.html
Era una casa per allotjar militars.