No las veía igual, unas tenían un verde más intenso que otras, además de tener un perfil más puntiagudo, así que para quitarme de dudas hablé con un agricultor de la zona y le pedí que me explicara el motivo. El pagés me explicó que hay dos variedades. Una, la de "toda la vida", la alcachofa Blanca de Tudela, es la autóctona de El Prat. Por lo que parece es muy sabrosa y de gusto más profundo, necesita más espacio y es más lenta de crecimiento. Su forma es ligeramente alargada, casi cónica.
La otra es la llamada híbrida americana, traída de Murcia, la que se planta en los invernaderos; es de crecimiento más rápido, aguanta más las enfermedades y una planta genera mayor cosecha, ya que necesita menos espacio. Se asemeja más a una pelota de golf.
Así que si pasean por El Prat, por sus campos, por sus "mojadas", observarán si son detallistas, que los verdes son diferentes, las hojas son similares, pero no iguales y la alzada dista mucho de parecerse.
(*) Mojadas: medida agraria catalana, equivalente al trozo de tierra que pueden labrar una pareja de bueyes en un día. Equivaldría a unos 4.896´5 m2.
Dijous en vaig menjar, de Tudela, al forn i amb una picada d.all i Julivert. Acompanyant un entrecot.
ResponderEliminarJa veus que són de dues classes diferents, allargades unes; rodones, les altres...També el sabor, unes més amargues i les altres més dolces.
EliminarMolt curiós.
Salut i bon dinar
Ummmm, que buenas están, en todas las formas posible las alcauciles. Aún están caras en la tienda, pero ya caerán. Buenas para los problemas de corazón.
ResponderEliminarSaludos
Muy buenas, mucho. Exquisitas. Las compré en el campo a 4 €, con mucha caña, todo se ha de decir.
EliminarPrefiero las de Tudela, tienen menos pelo y son más amargas.
Salut
Què curioso. Eres buen observador. Un beso
ResponderEliminarLas veía diferentes, de hecho, incluso, las híbridas tienen como una medio círculo en las hojas y su color es tirando a violeta en su base.
EliminarEs curioso, sí.
Un beso y buen día
Pues sí, qué modalidades de alcachofas. Pensando en lo sabrosas que son se me ocurre que si las hojas fueran comestibles sería un producto completo. Aparte de esto, la forma me parece espectacular, geometría y arquitectura de mano de la artista Madre Tierra.
ResponderEliminarRecuerdo que cuando las cosas no iban bien, de pequeño, mi madre hacía que mojara las hojas en una punta de sal, y las chupaba...así se aprovechaba todo.
EliminarSon bellas de estructura, ciertamente.
Salut i bon día
La curiosa disposición de las hojas de las alcachofa, como las piñas o los girasoles siguen la famosa frecuencia de Fibobacci, a mí siempre me han parecido verduras flor .la pena es q haya q despelujarlas enteras de hojas y de esa pelusilla para comerles su corazón ...mira q somos agresivos ..;) Nunca he visto una planta de alcachofas al natural, no tampoco el tipo de las murcianas.. sólo las de Tudela, riquísimas por cierto, como sus espárragos, aunq a estos sí q los he visto en la tierra...mil gracias por esta lección de horticultura, un besazo y buena semana MIGUEL !!
ResponderEliminarAy! María, me sale la vena de profe,"serie de Fibonacci", no frecuencia.En Matemáticas existen multitud de series,cada una representada por su fórmula general ,desde sencillas a más complicadas,la de Fibonacci no es precisamente de las más importantes. La palabra frecuencia,por ejemplo la puedes aplicar,en Física a la frecuencia de la corriente alterna doméstica, que es de 50 Hercios,en España.Perdona,pero así activo mi mente de viejo.
EliminarSaludos